El implante de un dispositivo en una persona parapléjica podrá hacerlos caminar de nuevo, se ha indicado en un artículo publicado en la revista Nature, donde se describe que un grupo de científicos han logrado que, al activar un interruptor, unos monos a los que se les ha paralizado una pierna en el laboratorio vuelvan a caminar y así se abre el camino hacia la posibilidad de que en el futuro, una persona con paraplejia y quizás hasta incluso un tetrapléjico, pueda volver a caminar.
Lo más revolucionario es que el sistema es una interfaz cerebro-médula espinal que no tiene en cuenta la lesión en la médula espinal, es decir, que se la salta.
El dispositivo cuenta con unos electrodos del tamaño de una píldora que se implantan en el cerebro. El chip cerebral recopila las señales de la corteza motora y un neurosensor inalámbrico las envía a un estimulador que está implantado en las vértebras lumbares, por debajo de la zona de la médula en que está la lesión y así se activan las neuronas motoras que coordinan el movimiento de los músculos responsables de extender y flexionar las piernas, lo que produce el movimiento.
La capacidad para emitir señales inalámbricas (wi-fi) ha sido fundamental en este resultado ya que los sistemas que funcionan mediante cables limitarían la libertad de movimiento, lo que a su vez limita la información que los científicos pueden reunir sobre la locomoción en un comportamiento natural.
En los animales experimentales uno de ellos recuperó la movilidad en una semana y el otro, en dos semanas después de realizado el implante.
Este es un paso importantísimo, aunque quizás llevará años poder utilizarlo en humanos, pero podría hacer que en un futuro no tan lejano, quizá en 10 años, podamos pensar en implantar un chip en un parapléjico y que éste pueda caminar de nuevo.
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