Durante los 9 días que duró el duelo nacional quedaron prohibidos los espectáculos, la música y la venta de bebidas alcohólicas. Además, la bandera nacional ondeó a media asta en todos los edificios públicos.
La Televisión Cubana, por su parte, sustituyó su programación habitual por una especial en memoria de Fidel Castro que incluyó la retransmisión en directo de todos los actos programados para homenajear la memoria del líder revolucionario.
Con el objetivo de que todos los cubanos mantuviesen el luto se veló estrictamente porque se siguieran las indicaciones oficiales hasta el punto de que organismos opositores y prensa independiente denunciaron multas y detenciones durante estos días .
Ahora, finalizado el duelo y una vez que los restos mortales de Fidel Castro han sido depositados en el cementerio de Santa Ifigenia, el pueblo cubano cierra un capítulo de su historia y vuelve al menos, oficialmente, a la normalidad.
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