Barack Obama, poco antes de abandonar la presidencia de EE.UU., avisó que daría su opinión sobre aquellas medidas de la nueva administración que amenazaran valores de la sociedad norteamericana, y así ha comenzado a hacerlo.
El ex-presidente ha roto su silencio: está a favor de las protestas contra la prohibición decretada por Donald Trump de vetar la entrada a EE.UU. de inmigrantes de siete países de mayoría musulmana.
Obama dice que Trump está poniendo en riesgo los valores americanos y ha insistido, a través de un portavoz, que "los ciudadanos ejercen su derecho constitucional de manifestarse".
El expresidente también ha rechazado la posiblidad de que ese decreto se haya inspirado en una política de su Administración; y es que varios portavoces de Trump han defendido que los países incluidos en el listado habían sido señalados previamente por la Administración de Barack Obama como posibles focos de terrorismo.
Sin embargo, medios de prensa insisten en que a pesar de citar los ataques del 11-S en su orden ejecutiva, Trump no ha prohibido la entrada de ciudadanos de los países de donde procedían los autores de aquellos atentados: Arabia Saudí y Egipto.
Ha sido Kevin Lewis, portavoz de Obama, quien ha revelado que el expresidente está "alentado por el nivel de compromiso que ve en comunidades de todo el país", y ha insistido también en que “está fundamentalmente en desacuerdo con la idea de discriminar a individuos por su fe o religión”.
Hay que recordar que la prohibición de entrada a inmigrantes de Siria, Yemen, Irán, Irak, Libia, Somalia y Sudan, incluso con visado, ha provocado numerosas protestas espontáneas en todo el país en los últimos días.
“Todos los estadounidenses deben ser guardianes de la democracia, no solo durante las elecciones”, agregó en referencia a las manifestaciones.
En sus últimas horas en la Casa Blanca, Obama prometió mantener el respeto que se espera de un expresidente sobre las políticas de su sucesor.
Sin embargo, hizo una excepción: hablaría si veía amenazados “valores centrales” de Estados Unidos; y en su opinión, eso ya ha ocurrido.
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