Nicolás Maduro le pagó 11 millones de dólares “en metálico” y “no declarados” a una publicista brasileña para que se encargara de la campaña electoral por la reelección de Hugo Chávez en 2012, informó la agencia EFE.
La publicista brasileña Mónica Moura, al frente de varias campañas electorales en América Latina junto a su esposo, hizo estas declaraciones ante la Fiscalía de Brasil, con la que pactó revelar los pagos ilícitos que recibió de Maduro, a cambio de tener una rebaja en la condena de ocho años a la que fue sentenciada la pareja el año pasado por corrupción y lavado de dinero.
Moura afirmó además que recibió otros 9 millones de dólares de constructoras brasileñas con negocios en Venezuela para la misma campaña de Chávez. Según la acusación, respaldadas por pruebas, el actual mandatario venezolano le entregó en persona el dinero en la sede de la Cancillería venezolana.
El trato inicial con Maduro incluía otros 15 millones de dólares por la campaña electoral, aunque este dinero nunca fue pagado. "Maduro recibía a Mónica (Moura) en su propio gabinete, le entregaba carpetas con dinero y le garantizaba escolta para darle seguridad en el recorrido de la Cancillería a la productora", dicta el texto de la delación.
La mayor parte de los pagos, según Moura, fue a cargo de las constructoras brasileñas Odebrecht (7 millones de dólares) y Andrade Gutierrez (2 millones de dólares mediante un depósito en Suiza).
Moura también citó a los exministros brasileños José Dirceu (Presidencia) y Franklin Martins (Secretaría de Comunicación Social), ambos durante los mandatos de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) como partes importantes en la campaña de Chávez.
La publicista aseguró que Franklin fue contratado para llevar "la parte de internet" de la campaña, "también sin contrato formal" porque "Nicolás Maduro era siempre muy desconfiado, no quería entregar dinero en metálico para más de una persona, por el riesgo de negociación" y por ello "entregaba todo el valor a Mónica Moura, que lo enviaba a la mujer de Franklin Martins", según la delación.
El matrimonio Santana-Moura fue detenido en febrero de 2016 al desembarcar en Brasil procedentes de la República Dominicana, donde trabajaban para la campaña electoral del presidente Danilo Medina. Ambos fueron condenados a ocho años de prisión por su participación en la trama de corruptelas en Petrobras, destacó la agencia.
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