El boxeador cubano Guillermo Rigondeaux tuvo un encuentro con la prensa, como parte de la campaña que ayuda a promocionar su pelea ante el mexicano Moisés Flores, el próximo 17 de junio, en el Mandalay Bay Resort and Casino, de Las Vegas.
"Nos estamos preparando al ciento por ciento. No soy de los que les gusta que algo lo sorprenda, así que no va a ver casualidad cuando suba al cuadrilátero con Flores. Todavía me falta un poquito para sentirme invencible, pero ya voy llegando'', expresó “El Chacal” a El Nuevo Herald.
“Rigo”, campeón de las 122 libras de la Asociación Mundial, defenderá ante el azteca en la velada de PPV -Pago Por Ver- de la revancha entre el ruso Sergey Kovalev y el estadounidense Andre Ward.
La pelea romperá la inactividad de casi once meses del santiaguero. "Todavía no lo creo. Hasta que no suene la campana. Todavía queda un mes. Me han pasado tantas cosas, se han caído otros rivales. Hasta que no le tire el primer golpe a Flores y sienta el impacto, pues no me lo creo''.
Asimismo, el doble monarca olímpico como amateur destacó la importancia que tiene este desafío en su angustiosa carrera profesional. "Sí, quiero mostrarle y sobre todo recordarle al público todo lo que soy y lo que sé hacer. Cuando no te ven mucho, a veces la gente se olvida por qué uno llegó a ser campeón. Un buen recordatorio de las habilidades no vienen mal''.
Durante el diálogo, Rigondeaux agradeció a los pugilistas (Andre) Ward y Mickey García, quienes lo consideran el mejor libra por libra del mundo. "Son muy generosos, porque no me lo creo. Ellos dos son grandes campeones, grandes entre los grandes, que entienden el alma verdadera del boxeo, sus fundamentos y me halaga que me reconozcan como tal''.
“Esta pelea puede romper el ciclo de poca acción y situarme en una vía donde los que me rehúyen ahora no tengan donde esconderse'', expuso el talentoso boxeador cubano.
Con información de El Nuevo Herald.
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