En el periódico Tribuna de la Habana, un artículo informa de algo que la población cubana conoce de antemano porque lo sufre a diario: la insuficiencia en los servicios de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, ETECSA.
El artículo se refiere a la telefonía fija: “Esta asistencia que ETECSA procura es precisamente de las más antiguas con que cuenta la empresa y todavía muestra ser la más afectada”, dice la periodista, quien se alegra de que en La Habana no haya pasado “un meteoro de gran intensidad”, ya que las lluvias de las últimas semanas han dejado sin servicio o interrumpido las líneas de decenas de usuarios en áreas del municipio Cerro, y zonas colindantes.
“En el caso que nos ocupa la avería o daño a la telefonía fija parece haber sido de gran envergadura en esa localidad, por lo viene trabajándose días en su solución”, añade.
Según se expone en el artículo, residentes de calles como 20 de mayo, Ayestarán y Tulipán, entre otros usuarios de vías adyacentes, “han manifestado interrupciones por alrededor de 7 días o más, señalando además que el contactar al número 114 establecido para avisar cualquier irregularidad les resultó muy difícil, y personalmente nosotros que no tuvimos en esta ocasión afectaciones, pudimos comprobarlo al tratar de hacer la reclamación de otras personas incomunicadas”.
Reclamaciones hechas a ese periódico muestran que hubo daños en cables centrales, “lo cual requirió de intensas labores por parte de los trabajadores de ETECSA”.
Luego la periodista añade: “Pero nos parece que si suceden interrupciones de envergadura como las de este mes de junio, debe fluir mejor la información entre las partes, de manera que en todos los casos, sin excepción, pueda conocerse el nivel de la avería y por tanto comprender, el por qué luego de una semana no está totalmente restablecido el servicio”.
Y precisamente ahí está la cuestión: la insuficiencia de ETECSA es algo con lo que los cubanos han tenido que lidiar, no sólo en la telefonía fija, porque las quejas por la telefonía móvil, servicios de correos u ofertas de recarga se emiten a esa empresa a diario.
Casi al finalizar, la periodista menciona una premisa importante: “Quizás sea imprescindible el empleo de los medios de comunicación de mayor alcance y audiencia”.
Pero esa es otra afirmación de la cual los cubanos se convencieron hace mucho: subsistimos en una “dinosáurica” época de las comunicaciones. Si aún estamos así con la telefonía fija, mejor no hablemos de Internet.
Con información de Tribuna de La Habana.
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