BARCELONA, 30 sep (Reuters) - España se prepara para que este domingo los independentistas catalanes voten en un referéndum que no cuenta ni con el apoyo internacional ni con garantías democráticas. Sin embargo, la sociedad catalana, profundamente dividida, se toma la consulta para que Cataluña se separe de España y forme un estado independiente como el de Kosovo, como un plebiscito contra el Gobierno conservador de Mariano Rajoy (PP).
Numerosos padres e hijos han dormido este viernes en colegios de Barcelona para evitar que la policía les impida entrar a votar este domingo. Mientras tanto, funcionarios del Ministerio del Interior español han acordonado la mitad de los centros escolares que necesita el Gobierno catalán para sacar adelante la consulta independentista. Paralelamente en varias ciudades españolas se han organizado manifestaciones que defienden la unidad del país.
Un funcionario del Gobierno español ha asegurado que se han acordonado 1.300 de los 2.315 colegios asignados por Cataluña para la consulta prevista para este domingo, la cual fue suspendida por el Tribunal Constitucional, y que 163 escuelas están ocupadas por familias que intentan mantener los centros abiertos.
Durante la noche grupos de padres realizaron una acampada frente a los colegios, con carpas y sacos de dormir, paella gratis y cine.
Otra fuente del Gobierno afirma que han sido enviados miles de efectivos policiales a Cataluña para impedir la votación. Además, añadió que la policía retirará a quienes asistan a votar y que podrían aplicarse multas de hasta 300.000 euros (354.360 dólares).
No obstante, el presidente catalán, Carles Puigdemont, dijo el viernes en una entrevista con Reuters que "está preparado todo para que efectivamente los más de 2.000 puntos de votación tengan las papeletas, tengan las urnas, tengan todo lo que tienen que tener para que la gente pueda expresar su opinión".
En tanto, unas 2.000 personas se manifestaron este sábado en el centro de Madrid en favor de la unidad española.
Entre banderas nacionales y cánticos de "Viva España", "Yo soy español", "Puigdemont a prisión" y "No nos engañan, Cataluña es España", la protesta recorrió calles céntricas hasta llegar al Ayuntamiento en la Plaza de Cibeles.
En otros puntos de España también había convocadas concentraciones contra una consulta que la mayoría de los catalanes quieren celebrar pese a que el sentimiento independentista a disminuido entre ellos, según sondeos.
Reporte de Sam Edwards; Escrito por Alba Asenjo e Inmaculada Sanz; Editado en español por Ana Laura Mitidieri.
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