Tres razones para creer que los Yanquis vencerán a los Mellizos

Admitido: un partido lo gana cualquiera, y por eso algunas voces claman por que los duelos de comodines se disputen en series al mejor de tres encuentros. Sin embargo, ahora mismo hay que resolverlos en una sola fecha (se acuerda del ‘dura lex, sed lex’?), y por ende el vaticinio se torna doblemente aventurero.

Pero bueno, mis favoritos para esta noche son los Yanquis. Y no porque la balanza de sus enfrentamientos de postemporada contra los Mellizos se vaya de su lado holgadamente –recordemos 2003, 2004, 2009 y 2010-, ni tampoco porque vengan de recetarles una barrida en Yankee Stadium, dos semanas atrás. Para ser exactos, mis razones apuntan al pitcheo abridor, el bullpen y Aaron Judge.

La lomita de los Mulos la va a escalar Luis Severino, el tercer abridor más brillante del año en la Liga Americana (por detrás solamente de Chris Sale y Corey Kluber). El muchacho, cuyo promedio de velocidad fue el más alto de todos los abridores de este curso, luce excesivamente autoritario, en especial si enfrente tendrá a un veterano como Ervin Santana que bajó su rendimiento en la segunda mitad de la campaña.

Luego están, por supuesto, los relevos. Habida cuenta de que en un match de vida o muerte el starter puede salir del box a las primeras de cambio, el papel del pitcheo ‘de atrás’ multiplica su valor en el mercado. Y si usted cuenta con David Robertson, Chad Green, Adam Warren, Tommy Kahnle, Dellin Betances y –oh mi Dios- Aroldis Chapman, entonces tiene casi garantizados los últimos nueve outs de cada desafío.

Justo ahí, en el bullpen, está la mayor fuerza de estos Yanquis. Y por más que se esfuercen en la trinchera opuesta los brazos de Matt Belisle, Trevor Hildenberger y Alan Busenitz, existe una ventaja abrumadora en casa del vecino.

Finalmente, está el Juez. El outfielder implantó record de jonrones para novato, pelea con el diminuto José Altuve la placa de MVP, y en sus muñecas guarda toda la pólvora que no poseen, juntos, los bateadores de los Twins. Terminó on fire el año, y hoy saldrá a descoser la Rawlings y el partido.

Esos tres elementos deben ser suficientes, creo yo, para que los Yanquis empiecen a enfrentar a los Indios el jueves venidero.