La compañía Norwegian Cruise Line ha aclarado en su página web que mantendrán los cruceros con escala en Cuba porque todos sus rutas y excursiones en territorio cubano "cumplen plenamente con las regulaciones establecidas por el Departamento de Hacienda de los Estados Unidos y la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC)". Además, añaden que trabajarán coordinados con la Administración (norteamericana) "para cumplir con cualquier cambio y cualquier otro reglamento que resulte de su decisión". Aseguran igualmente que les gustaría que "continúen los viajes educativos y que apoyan al pueblo cubano".
Comunicados similares han emitido otras líneas de cruceros como Carnival y Royal Caribbean, que continuarán llevando turistas a la Isla pese a la advertencia del Departamento de Estado norteamericano, que desaconseja viajar a Cuba porque considera que en la Isla no está garantizada la seguridad de los estadounidenses debido a los supuestos ataques acústicos que habrían sufrido 22 diplomáticos en la embajada de EEUU en La Habana.
Significa esto que las principales líneas que llevan cruceros a Cuba han toman nota de la advertencia de no viajar a la Isla, pero mantienen los viajes programados con escalas en puertos cubanos. Según publica Martí Noticias, Carnival, por ejemplo, ha asegurado en un comunicado que si bien se han reportado afecciones en miembros del cuerpo diplomático estadounidense y sus familiares "aparentemente desencadenados por sucesos ocurridos en las oficinas diplomáticas o posiblemente en sus hogares, ninguno de los otros 475.000 estadounidenses que han visitado Cuba ha reportado similares problemas de salud relacionados con sus visitas”.
Así mismo aseguran que están trabajando codo con codo con las autoridades norteamericanas y cubanas y que mantendrán informados a sus clientes si consideran que tiene que haber algún cambio de planes.
Desde Norwegian insisten en que consideran que la mejor forma de viajar a Cuba es en un crucero, pero no especifican si tras la advertencia de EEUU de no viajar a la Isla han recibido cancelaciones de viajes.
Royal Caribbean, por su parte, asegura también en una nota de prensa que son "conscientes de que el Departamento de Estado ha publicado una advertencia de viaje para Cuba. Dado que la advertencia obedece a sucesos acaecidos en residencias de diplomáticos de los Estados Unidos y hoteles frecuentados por ciudadanos estadounidenses, no creemos que representen un riesgo para los pasajeros de nuestros cruceros. Nuestros huéspedes exploran La Habana en recorridos escoltados y no visitan hoteles. Seguiremos monitoreando la situación y revisaremos cualquier información adicional que pueda ser publicada".
Solo los estadounidenses que viajaron a la Isla en 2016 se dejaron allí, 300 millones de dólares. A esto hay que sumar los 13 millones de dólares que las compañías abonan al Gobierno cubano en concepto de tasas portuarias (79.000 dólares por cada buque de entre 684 y 2.052 pasajeros).
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