A Rusia no le ha gustado que uno de los monumentos levantados en Sofía, la capital búlgara, en la época soviética exhiba ahora a sus protagonistas transformados por un grafitero en superhéroes de cómics. Según publica Earthly Mission citando a la agencia ITAR Tass, las autoridades rusas han exigido a Bulgaria que sancione al responsable y se esfuerce en evitar este tipo de vandalismos.
La embajada rusa en Bulgaria ha emitido una nota exigiendo a su ex aliado que limpie el monumento ubicado en el distrito de Lozenets de Sofía. También que identifique y castigue a los responsables y tome "medidas exhaustivas" para evitar ataques similares. A las autoridades rusas no les sentó bien ver a los héroes del Ejército Rojo que ayudaron a liberar "Bulgaria y Europa del nazismo", convertidos en Superman e incluso en Santa Claus. Tampoco el título que ha recibido la obra: "En el paso de los tiempos".
Sin embargo, la aparición del Capitán América, Batman o Robin sobre el monumento soviético se ha convertido en una atracción turística. Así lo recoge el diario británico The Guardian, que destaca que los rusos son muy susceptibles con estos temas. De esta forma recuerda que en el año 2007 hubo un hombre apuñalado y varios heridos cuando el Gobierno de Estonia decidió retirar la escultura del Soldado de Bronce, lo que acarreó aireadas protestas de ciudadanos rusos.
No es la primera vez que este mismo monumento de Sofía es atacado por grafiteros. En 2011 fue pintado también con superhéroes. En 2013, de color rosado con la inscripción "Bulgaria se disculpa para conmemorar el aniversario de la Primavera de Praga". En febrero pasado, con los colores de la bandera de Ucrania. Y hace poco, el 17 de agosto, fue bañado en pintura roja poco antes de la celebración del 123 aniversario del Partido Socialista Búlgaro. Todos los actos vandálicos han recibido la misma respuesta contundente por parte de las autoridades de Moscú.
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