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Tras la coronación de Yuli Gurriel en las Grandes Ligas, otros dos peloteros cubanos también buscan anillo de campeón en un torneo competitivo del deporte de las bolas y los strikes.
La Liga Japonesa de Béisbol Profesional (NPB, por las siglas en inglés) está a punto de bajar sus cortinas y en el epílogo Alfredo Despaigne y Liván Moinelo, miembros del Fukuoka Softbank Hawks, están a un paso de vestirse de héroes.
El Fukuoka buscará este sábado someter al Yokohama DeNA Baystars -equipo de Gurriel en la tierra del Sol Naciente-, que ha vendido bien cara su derrota y llega tras un par de victorias de manera consecutiva.
El pasado martes, los Halcones alcanzaron su tercer éxito en línea y todo estaba listo para rematar a un contrincante herido, sin embargo, el Yokohama no se amilanó y ha mostrado sus armas para extender el play-off final a un sexto desafío.
Durante el quinto partido, el pitcher zurdo pinareño salió con el fracaso a cuesta luego de soportar la rayita decisiva en una entrada y dos tercios de actuación en rol de relevista. Mientras que Despaigne bateó de 3-0, con una carrera remolcada -fly de sacrificio-, para disminuir su average a .278 en la postemporada. El juego finalizó 5-4 favorable al DeNA.
De esta manera, en el Yafuoku Dome de Fukuoka, ante su público, los Halcones buscarán la sonrisa este 4 de noviembre, que de materializarse convertiría a Despaigne y a Moinelo en los cubanos tres y cuatro en coronarse en la Serie de Japón. Antes, apenas, solo lo consiguieron Orestes Destrade (Leones de Seibu, 1990-1992, incluido premio MVP, en 1990) y Bárbaro Cañizares (Fukuoka Softbank Hawks, 2015).
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Un extraclase del béisbol de la Isla, Omar Linares, estuvo presente en la finalísima del 2004, con los Dragones de Chunichi, pero su selección cayó en cerrada subserie (3-4) ante los Leones de Seibu.
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