El Canal Habana está trasmitiendo, a las diez de la noche, cuatro veces a la semana Tarde lo conocí, protagonizada por la actriz colombo ecuatoriana Maria Elisa Camargo, junto con Roberto Urbina y Javier Jattin. Y aunque la señal del Canal Habana sea visible solo en la capital, llega al resto del país solo para los privilegiados que pudieron comprar una cajita decodificadora, o través del llamado Paquete Audiovisual.
Tarde lo conocí cuenta con el atractivo extra, para los cubanos, del reencuentro con dos actrices cubanas, amadas y populares en los años noventa: Jacqueline Arenal y Laura Ramos, quienes llevan más o menos dos décadas trabajando en la televisión colombiana, aunque en este caso sus papeles son más bien secundarios o de apoyo.
Tarde lo conocí intenta respetar la esencia de Patricia Teherán como artista, y por tanto se cuidó la forma de hablar, de expresarse y de cantar. La actriz María Luisa Camargo viajó a Cartagena, donde se ambienta la telenovela, para acercarse a su familia y conocidos.
La producción cuenta con un buen trabajo en los departamentos de arte, vestuario, maquillaje y fotografía, a lo largo de las más de 350 locaciones en exteriores, con más de 290 actores, escenas de acción y de época, y paisajes representativos no solo de Cartagena, sino de muchas otras localidades como Cundinamarca y Boyacá.
La serie está dirigida por Klych López, Mónica Botero y Álvaro Castillo, y los libretos están a cargo de Juana Uribe, Adriana Arango, Paola Arias y Catalina Palomino, todos ellos encargados de mostrar el antes y el después en una época en que el vallenato era un género único y exclusivamente para hombres, hasta que Patricia Teherán le puso fin a esa tradición machista y excluyente.
El 19 de enero de 1995, en una carretera cercana a Cartagena, Patricia Teherán perdió la vida a los 25 años, luego de haber inspirado a muchísimas mujeres con sus canciones. Y como la telenovela comienza por el final del personaje tampoco puede decirse que este texto revele el final de la telenovela.
Tarde lo conocí se ganó el corazón de los televidentes colombianos y desde su estreno pocas veces bajó de los primeros puestos de la lista de rating. En Cuba tal vez no tenga un éxito tan tremendo, aunque muy pronto la retrasmitirá Cubavisión y solo entonces se sabrá si le interesa o no a un grupo grande de televidentes cubanos.
La telenovela Tarde lo conocí significa una lección en cuanto al salvamento del patrimonio artístico y cultural, algo que las telenovelas colombianas saben hacer muy bien, pero que en Cuba apenas se ha intentado con éxito, más allá de la memorable Al compás del son. Tarde lo conocí llega después de las también colombianas Sinú, río de pasiones y La esclava blanca.
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