Instalada muy cerca del mar, en el municipio Playa, la Carpa Trompoloco fue una de las instituciones que mayores daños sufrió por el paso del huracán Irma dentro del sector de la cultura.
La popularísima carpa, devenida opción para el solaz y esparcimiento de niños y mayores, sobre todo durante el verano, ha sido sometida a un amplio proceso de recuperación por trabajadores del Ministerio de Cultura de Cuba.
De este modo, el famoso Circo Nacional de Cuba, próximo a celebrar su aniversario 50 en 2018, retornará a su escenario natural, la Carpa Trompoloco, orgullo de las artes circenses cubanas, fundada en el verano de 2005.
Luego de una reparación capital, se le incorporó un sistema de climatización para el mayor confort de espectadores y artistas. En su interior totalmente climatizado caben más de dos mil personas, y debe decirse que la Carpa no solo presenta espectáculos circenses, sino también galas artísticas y conciertos en diversos formatos.
La Carpa debe su nombre al famoso personaje de payaso creado por Erdwin Fernández, llamado Trompoloco y adorado por los niños cubanos de hace unas cuantas décadas. Así, se le rinde homenaje perpetuo a uno de los grandes actores y humoristas cubanos, alguien que dedicó a los niños un trabajo serio y profesional, interesado en comunicar valores humanos medio extraviados en la actualidad cultural cubana.
Según información del divulgador José Manuel Cordero, la Carpa quedará lista para espectáculos circenses y musicales, y así sostener el prestigio aportado al lugar por la calidad de su espectáculo, los festivales internacional Circuba, y por la visita de importantes personalidades del circo mundial.
Entre tales personalidades se cuentan Andrés Atayde, dueño del circo homónimo mexicano; Anna Gasser, directora general del Silver Circus de Australia; Yves Sheriff, director de casting del Cirque du Soleil en Canadá; y Pascal Jacob, diseñador del Festival del Circo del Mañana (Pista de París), entre otros.
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