Serguéi Lavrov (ministro de Relaciones Exteriores de Rusia) ha tildado el discurso sobre Corea del Norte de la embajadora de EE.UU. ante la ONU, Nikki Haley, de "diatriba sangrienta".
El diplomático ha asegurado que Rusia hará todo lo posible para que esto no suceda y para que el conflicto tenga una solución "únicamente de manera pacífica, política y diplomática".
Haley ―embajadora de EE.UU. ante Naciones Unidas― pidió directamente a todos los países del mundo que suspendan cualquier clase de relación, vínculo y todo tratado existente con Corea del Norte.
Y subrayó que "en caso de guerra" el régimen de Corea del Norte será "completamente destruido".
Sobre esto Lavrov ha señalado que "los estadounidenses deben explicarnos a todos qué es lo que pretenden. Si están buscando un pretexto para destruir a Corea del Norte, como mencionó la embajadora de EE.UU. en el Consejo de Seguridad de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), que lo digan abiertamente y que lo confirmen los máximos dirigentes del país. Entonces decidiremos cómo reaccionamos".
En una rueda de prensa tras unas negociaciones en Roma con su homólogo italiano, Angelino Alfano, el ministro de Exteriores de Rusia precisó que EE.UU. está manifestando que "realmente tiene muchas ganas de emplear la fuerza" para aniquilar a Corea del Norte, y añadió que "están jugando con fuego” y que “es un gran error".
Este miércoles Pyonyang llevó a cabo la prueba de un nuevo misil balístico intercontinental, denominado Hwasong-15. El líder norcoreano Kim Jong-un destacó que con ese ensayo su país ha completado su programa nuclear.
El misil en cuestión se elevó a 4.500 kilómetros, según confirmó el Pentágono. Lo anterior supone que el misil acanzó la mayor altura alcanzada por un cohete de Corea del Norte. La cifra supera en más de diez veces la altura a la que orbita la Estación Espacial Internacional.
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