El derby catalán entre Barcelona y Espanyol será el plato fuerte de los cuartos de final de la Copa del Rey, cuyo sorteo deparó también las pulseadas Atlético de Madrid-Sevilla, Valencia-Alavés y, en otro enfrentamiento entre clubes de la misma ciudad, Real Madrid-Leganés.
A priori, el duelo entre culés y pericos debiera favorecer sin apremios a los hombres de Ernesto Valverde, que se mantienen invictos en LaLiga y la encabezan con nueve puntos por delante de sus escoltas en la clasificación y 25 sobre sus rivales de turno.
En esta clase de eliminatorias el Barça salió airoso en siete de los nueve cruces que han sostenido ambas escuadras, incluyendo el más reciente en los octavos de final de la temporada 2015-16.
Por su parte, Valencia y Real Madrid también parten como claros favoritos ante los adversarios que les deparó el emparejamiento.
“Es una ilusión. Podemos pelear por llegar lejos; lo afrontamos con ilusión pero total respeto”, explicó Marcelino, el entrenador del equipo che, en declaraciones citadas por ESPN.
Mientras, Zinedine Zidane de seguro se siente confiado de las opciones de sus hombres ante el débil Leganés, pues en series a doble partido sería una sorpresa colosal que los merengues no consiguieran este pase, más allá del horrible momento que vive la entidad blanca.
Finalmente, en el duelo de más difícil vaticinio, sevillanos y colchoneros lidiarán con el añadido del regreso de Vitolo al Sánchez Pizjuán.
Los azulgranas son los máximos ganadores históricos de este torneo con 29 éxitos, seguidos por los 23 del Athletic Club y los 19 del Real Madrid.
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