Con el nuevo año, la urbe capitalina continúa dando pasos para aliviar las carencias de uno de los servicios urbanos que más presionan al país desde hace décadas, el transporte. Entretanto, el máximo representante gubernamental del sector viaja a Rusia para ampliar nexos comerciales con un país que vuelve a convertirse en principal suministrador de medios de locomoción para Cuba.
Líneas de taxis y de ómnibus públicos se han sumado gradualmente desde diciembre pasado entre destinos clave de la geografía habanera. La incorporación más reciente tuvo lugar en la el 12 de febrero.
El nuevo servicio expreso de ómnibus operará entre los municipios de Plaza de la Revolución y de La Habana del Este. Con un itinerario fijo y paradas seleccionadas cerca de hospitales y otros puntos importantes, busca conectar el centro capitalino del Vedado y el reparto periférico de Alamar, que funciona como ciudad dormitorio.
La nueva ruta, programada de lunes a viernes, la proponen las autoridades locales como una opción más para la salida y entrada al reparto de Alamar, en Habana del Este, en un horario de mucho tránsito, de 6.30 a 8.30 am y de 4.30 a 6.30 pm. El 18 de diciembre otro servicio similar comenzó a funcionar entre estos dos concurridos puntos de La Habana.
El gobierno también abrió en enero dos nuevas líneas de taxis, entre los mismos destinos de Alamar y el Vedado, como parte de una estrategia para mejorar los viajes de pasajeros en horarios de elevada demanda.
Los habaneros identifican estos servicios como taxis ruteros por estar programados para recorrer rutas fijas.
Con la incorporación de nuevos taxis ruteros mejoran también las alternativas de traslado en la capital hasta el municipio de Habana del Este.
El director de Transporte de La Habana, José Conesa, reconoció que la apertura de estas nuevas alternativas no da respuesta total a la transportación de pasajeros en La Habana, pero ayuda a satisfacer una parte de la creciente demanda del territorio.
Tras comentar que la solución definitiva es aumentar el servicio de ómnibus urbanos, Conesa informó que la provincia adquiere cada año 90 de estos equipos, cifra que se espera incrementar. Las autoridades también han dado pasos para reordenar estos servicios, a fin de explotar el equipamiento disponible con más eficiencia.
Mientras, el ministro cubano de Transporte, AdelYzquierdo, visitó Moscú a fines de enero con el propósito declarado de estrechar vínculos en las ramas automotriz, ferroviaria, aérea y marítimo-portuaria. Desde hace un par de años, las producciones rusas del transporte han vuelto a ganar protagonismo comercial en Cuba.
El suministro de locomotoras y autos de la marca Lada en meses recientes renueva los nexos en un sector que a lo largo de varias décadas fue dominando por las producciones de la antigua Unión Soviética.
Durante la visita a Rusia, Yzquierdo se reunió con el ministro de Industria y Comercio de esa nación, Denis Manturov, y el presidente del sector ferroviario, OlegBelaziorov, para evaluar el comportamiento del suministro de locomotoras, piezas, equipos de taller y capacitación para los ferrocarriles. También lo recibió el presidente de la compañía automotriz Avtovaz, fabricante de los automóviles Lada, Nicolás Moure.
En otras provincias también han entrado en circulación algunas alternativas para reforzar gradualmente las opciones de transporte. (2018).
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