La embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Nikki Haley, envió un mensaje de advertencia a la organización internacional en relación al conflicto que se vive en Siria.
"Cuando la comunidad internacional fracasa constantemente en sus actuaciones, hay momentos en que Estados Unidos se ve obligado a tomar sus propias medidas", aseguró este lunes en declaraciones recogidas por 'Reuters'.
Este mensaje de la representante de la administración Trump es enviado en un momento en que Washington ha pedido al Consejo de Seguridad que exija el fin de las hostilidades en Damasco y Guta Oriental en un plazo de 30 días.
Recientemente el Consejo de Derechos Humanos de la ONU (CDH) aprobó una resolución en la que reclama a todas las partes combatientes en territorio sirio, en particular al Gobierno, que permitan la entrada de ayuda humanitaria a Guta Oriental, un área de la periferia de Damasco que llevaba semanas siendo bombardeada.
En esta población viven cerca de 400.000 civiles, de los cuales la mitad son menores de edad, que no han recibido ningún tipo de asistencia desde que las fuerzas gubernamentales iniciaron la actual ofensiva el 18 de febrero.
Haley defendió las posibles actuaciones de Estados Unidos en el futuro. "No es el camino que preferimos, pero hemos demostrado que ese es el camino que tomaremos y estamos dispuestos a tomar nuevamente", añadió al citado medio.
En este sentido, la embajadora norteamericana anunció un nuevo proyecto para que se produzca el alto el fuego en Siria, el cual no tendrá "ningún vacío legal antiterrorista".
Las dudas estriban en cómo va a conseguir Estados Unidos que cumplan con este plan los grupos terroristas.
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