Sin nada en su fútbol y sin la mentalidad ganadora de (casi) siempre, el FC Barcelona sufrió un sorprendente fracaso en la Liga de Campeones para quedar eliminado en la ronda de cuartos de final, por enésima vez en los últimos años. Ernesto Valverde, Lionel Messi y todos sus cómplices arribaron a la capital de Italia con casi todo resuelto y regresarán a la Ciudad Condal pletóricos de tristezas.
Todos los caminos condujeron a Roma a cumplir lo “imposible”. En el Estadio Olímpico lograron un 3-0 impensado para un global 4-4 que los mandó a semifinales gracias al gol fuera de casa, después de un esfuerzo mayúsculo y de demostrar que fueron muy superiores a un peso pesado como el equipo culé. La Serie A aplastó a LaLiga, como LaLiga, con el Real Madrid, minimizó hace una semana a la Serie A, con su líder Juventus.
Kostas Manolas anotó el gol tardío que supuso el jaque mate para un Barcelona que sumó su primera y única derrota en la Champions de esta campaña. Las redes se mecieron y las esperanzas de millones tocaron fondo.
Perdiendo 4-1 después del partido de ida, Roma se adelantó en la noche europea luego de seis minutos, cuando el bosnio Edin Dzeko se aferró a un pase de largo de Daniele de Rossi para superar a Umtiti y batir a Marc-André ter Stegen.
De Rossi duplicó su ventaja en el 58 desde el punto de penalti luego de que Dzeko fuera derribado en el área al comienzo de la segunda mitad y Manolas aseguró el puesto de Roma entre los últimos cuatro.
El duelo es histórico para los romanos porque además del triunfo fenomenal avanzaron por primera vez en su historia a esta instancia de la Liga de Campeones. A ellos se une el Liverpool, que venció 5-1 a Manchester City en el global. Ambos equipos aguardan por los resultados de este miércoles del Bayern Munich vs. Sevilla (2-1) y Real Madrid vs. Juventus (3-0).
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