Pito Abreu, camino de otro Juego de Estrellas

En el año 2014, José Dariel Abreu se estrenó en Grandes Ligas con un ritmo desaforado que no solo le valió el galardón al Novato del Año y el Bate de Plata, sino también su presencia en el Juego de Estrellas. Era el premio a una campaña portentosa en que largó 36 jonrones y empujó 107 carreras, con secuencia ofensiva de .317/.383/.581.

Desde entonces, el gigante de Mal Tiempo jamás ha bajado de 25 cuadrangulares y 100 remolques en un año. Sin embargo, no ha podido volver al partido que reúne a los mejores jugadores de los primeros tres meses de cada temporada. ¿Será que ahora sí regresará?

A sus 31 abriles, Pito vive otro sólido curso con el uniforme de los Medias Blancas. Cumplida la jornada de jueves su average anclaba en .298, con porcentaje de embasado de .360 y slugging de .522, cifras todas muy próximas a las medias históricas de su aventura ligamayorista. Encima, acumulaba nueve bambinazos y 31 impulsadas.

Si miramos a las estadísticas de los inicialistas de la Liga Americana en 2018, únicamente Mitch Moreland puede sostenerle la pulseada. Miguel Cabrera ha sido maltratado por las lesiones, Justin Smoak y Yonder Alonso no han lucido como hace doce meses, Albert Pujols ya no está en condiciones de contender con un hombre en absoluta plenitud, y el caso de Chris Davis vale más no comentarlo.

Moreland es el rival a derrotar. Su slugging desmesurado de .612 le concede casi un centenar de puntos de OPS más que el cienfueguero, aunque justo es decir que el veterano de los Medias Rojas acumulaba un significativo número de comparecencias menos, toda vez que no fue titular indiscutido hasta que Hanley Ramírez fue puesto en asignación por la franquicia bostoniana.

Ahora bien, como quiera que los aficionados son quienes seleccionan a los abridores de cada posición en el All Star Game, es de esperar que ese voto vaya a parar a algún monstruo sagrado, como es el caso de ese mismo Pujols que en esta temporada arribó a los tres mil hits en la MLB.

Así pues, sospecho que el cubano estará peleando por la plaza de suplente, que es determinada por los sufragios de los jugadores. Moreland será una piedra grande en el camino a ese partido señalado para julio 17 en el Nationals Park de Washington, y de aquí en adelante se vislumbra una fuerte disputa entre ambos, con superiores opciones (sin que el nacionalismo me ciegue) para ese ‘79’ que cada año pone más en alto a Cuba en los altares del pasatiempo del strike.