Ido Cristiano Ronaldo, los seguidores del Real Madrid se ilusionaron con la llegada de un futbolista de caché para llenar ese vacío. Enseguida afloró el nombre de Neymar, y no faltaron especulaciones en torno a los posibles arribos de personajes como Eden Hazard, Robert Lewandowski, Mauro Icardi o el fenómeno galo Kylian Mbappé.
Sin embargo, nada de ello ocurrió. El equipo merengue invirtió más de cien millones de euros, pero entre los elementos contratados solo sobresalía verdaderamente el portero belga Thibaut Courtois. Mariano Díaz, Álvaro Odriozola y el prometedor brasileño Vinicius Junior, apenas funcionaron como aperitivos en la mesa del fanático blanco.
Faltaba el golpe sobre la mesa, y éste nunca llegó. A las órdenes de Julen Lopetegui, la escuadra ha avanzado sin tropiezos por La Liga, pero la gente sigue reclamando un crack. Ese crack que podría desembarcar en Madrid en el verano próximo, una vez consumada la Operación Galáctico 2019, que así habría sido bautizada en Chamartín según la información publicada por el digital OK Diario.
Los dos focos de atención son Neymar y Mbappé, dos de los hombres que “trabajan” en el tridente del PSG. El canarinho ha sido desde hace rato el sueño irrealizado de Florentino Pérez. El francés dejó claro en la cita universal de Rusia que es el atacante con más proyecciones en el mundo.
En la directiva del club, los criterios están divididos en cuanto a la preferencia por uno u otro jugador. Sin embargo, y he aquí lo más amenazante, no faltan los que sugieren contratar a ambos. ¿Se lo imagina usted?
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