Yasmani Grandal vivió posiblemente la peor jornada defensiva de su carrera en el primer partido de la serie de campeonato de la Liga Nacional entre sus Dodgers y los Cerveceros, donde su compatriota Yasiel Puig tuvo una participación efímera.
El receptor de los californianos cometió dos errores y encima firmó par de passed balls, y sus deslices resultaron decisivos para que Milwaukee tomara el mando en el tercer capítulo del choque.
Con el madero en ristre, Grandal salió de 4-1 con dos ponches y continúa poco productivo en esta postemporada. El habanero está de 17-2 en los cinco juegos celebrados después del calendario regular, para paupérrimo average de .118. Su producción incluye un jonrón, tres boletos y siete ponchetes, con par de anotadas y un remolque solitario.
Por cierto, su paso por las postemporadas muestra índices altamente preocupantes: en cuatro presencias en esa fase Grandal batea de 63-6, lo cual arroja promedio de .095.
El otro cubano de los Dodgers, Puig, no halló espacio en la novena titular de Dave Roberts y compareció a la caja de bateo como emergente durante la rebelión del octavo episodio, en lugar del lanzador Julio Urías. Lamentablemente, no pudo descifrar el knuckle curve de Jeremy Jeffress y regresó a la cueva con un nuevo estrucado en su expediente.
Caballo Loco lleva de 10-3 (.300) en la etapa en curso.
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