El estado de Nueva Jersey presentó este jueves nuevas medidas que restringen la colaboración de los 36.000 agentes de la Policía con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos al considerar que los policías deben hacer cumplir leyes penales estatales y las autoridades federales migratorias, la ley federal civil de Inmigración.
Las nuevas reglas han sido anunciadas por el fiscal general estatal, Gurbir Grewal, en la mítica terminal ferroviaria Liberty State Park, por donde han entrado millones de inmigrantes.
Bajo las nuevas normas no se permite que los oficiales de la Policía participen en operaciones civiles aplicando la ley migratoria. Tampoco se les permite detener, interrogar, arrestar o retener a una persona sólo por considerar que puede ser un indocumentado y tienen prohibido que pregunten a un ciudadano su situación migratoria, excepto en casos excepcionales en que dicha situación esté relacionada con una investigación criminal.
Si un inmigrante es detenido, no se permitirá que los agentes del ICE lo entrevisten en la cárcel si el arrestado no da su consentimiento.
Estas normas afectan a todos los oficiales locales y estatales, que consideran que el cambio les permitirán reforzar la confianza con la comunidad a la que protegen.
Más información, en la página web nj.gov/trust.
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