El príncipe Carlos de Inglaterra podría convertirse en el primer miembro de la Familia Real británica en visitar Cuba durante una histórica gira oficial que realizará en 2019.
Aunque la visita a la Isla todavía se encuentra en su etapa de planificación y no se ha confirmado, la prensa británica ha indicado que funcionarios gubernamentales de ambos países tendrían "muchas esperanzas" de que la noticia se haga oficial en los próximos meses.
Ahora ha trascendido que Carlos se reunió el mes pasado con el gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, en Clarence House, durante el breve tránsito que el mandatario cubano hizo en Londres al regreso de su gira por Asia. Fuentes diplomáticas consideran que el encuentro sostenido entonces entre Carlos de Inglaterra y gobernante cubano habría sido un signo extremadamente positivo de acercamiento que podría dar frutos.
El viaje de Carlos de Inglatera a Cuba, que sería parte de una gira a gran escala que realizará el heredero del trono británico por el Caribe, habría sido impensable hace unos años. Sin embargo, en 2016 Barack Obama se convirtió en el primer presidente norteamericano en visitar la Isla en 88 años, un viaje que medios británicos consideran que abrió el camino a que otras figuras de alto calado internacional sigan esa estela.
Dado que la Reina Isabel II (92 años) ya no realiza viajes al extranjero, los viajes oficiales del príncipe Carlos son similares a una visita de estado, y en este caso en particular sería visto, además, como un importante paso de avance en las relaciones de Reino Unido con la Isla.
La Oficina de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth considera que los tours reales constituyen un arma importante en su arsenal diplomático, un despliegue al que a menudo se hace referencia como "poder blando".
El Daily Mail considera que muchos miembros de la realeza, y especialmente Carlos, tienen la capacidad de abrir puertas en lugares del mundo donde los políticos no pueden, y que allanan el camino para negociaciones de alto nivel.
Sin embargo, Carlos (de 70 años), que iría a Cuba acompañado por su esposa, la duquesa de Cornualles (71 años), "tendrá que andar con cuidado, ya que es probable que la visita sin precedentes se vea con cautela en los Estados Unidos", afirman desde el citado diario.
Más allá de precauciones, diplomáticos del Reino Unido esperan que la noticia se confirme y que la visita de un miembro de la realeza británica sirva para extender la presencia de ese país en Cuba, particularmente una vez que Gran Bretaña haya abandonado la Unión Europea.
Fuentes diplomáticas indican que el Gobierno británico estará dispuesto, además, a alentar una Cuba "más moderna, abierta y libre".
No es la de Carlos de Inglaterra la única visita de una monarquía europea que podría recibir Cuba en 2019, pues hace poco más de tres semanas se dio a conocer que tanto la Casa Real española como el Gobierno de Pedro Sánchez estarían barajando la posibilidad de que el rey Felipe VI viaje oficialmente a La Habana en 2019, coincidiendo con los actos centrales por la celebración de los 500 años de la fundación de la ciudad.
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