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Ministra de Trabajo cubana reconoce el "impacto negativo de los salarios" en la incorporación laboral

Actualmente hay 3 millones de cubanos trabajando en el sector estatal.

Margarita González Fernández, ministra del Trabajo y Seguridad Social © Mesa Redonda (captura de video)
Margarita González Fernández, ministra del Trabajo y Seguridad Social Foto © Mesa Redonda (captura de video)

Este artículo es de hace 5 años

Margarita González Fernández, titular del Trabajo y Seguridad Social en Cuba, informó durante una reciente reunión del Consejo de Ministros, que los problemas de la incorporación laboral en el país, se deben -en parte- al “impacto negativo del salario como vía fundamental para satisfacer las necesidades”.

En la sesión, acontecida a inicios de la semana pasada, se debatió sobre los problemas referentes al trabajo en la Isla, durante los últimos diez años.

Según González Fernández, en el año 2018 se calculó un aproximado de 4 482 700 cubanos empleados: 3 millones en el sector estatal y más de un millón en el no estatal. En esta última categoría entran aquellos en cooperativas de producción agropecuaria, de créditos y servicios, unidades básicas de producción cooperativa, usufructuarios, trabajadores por cuenta propia, entre otros.

La ministra dio a conocer, igualmente, que existe un envejecimiento en la fuerza laboral, ya que el 61% de los cubanos empleados superan los 40 años de edad. Lo cual no tendrá una solución a “corto plazo”.

Como posibles respuestas González Fernández comentó sobre la posibilidad de generar empleos y recuperar “capacidades existentes” en el sector productivo, a través de las “nuevas de las inversiones” en la industria nacional, previstas en el Plan de la Economía de 2020.

Durante el encuentro, Miguel Díaz-Canel afirmó que la falta de personal en las instituciones del país, era consecuencia de la poca motivación existente dentro de los propios centros laborales.

“Tenemos que crear condiciones más óptimas y favorables, motivadoras, lo cual puede conseguirse sin gastos superfluos”, explicó.

No obstante, los bajos salarios que el Gobierno paga a sus empleados estatales frente al elevado costo de los productos básicos necesarios para subsistir en el país, tiende a ser una de las principales causas de la falta de incorporación labor de los cubanos.

La escaza remuneración económica recibida es constantemente criticada por parte de los residentes, organizaciones internacionales y también de movimientos opositores.

De acuerdo con datos de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), el salario medio en Cuba subió 1.08 dólares en 2017. Las retribuciones medias mensuales en la Isla llegaron a 767 pesos (30.68 dólares), frente a los 740 pesos (29.6 dólares) de 2016.

Hace tres meses, el Estado cubano se encontraba preparando “con máxima prioridad” una reforma salarial. Una modificación a la política del país, condicionada por la dualidad monetaria y cambiaria.



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