Este domingo, 24 de marzo, los representantes de la corona británica -el Príncipe de Gales y la Duquesa de Cornualles- iniciarán su visita oficial a Cuba. Sus Altezas Reales estarán en la Isla hasta el día 27, como parte de un recorrido por el Caribe.
Se prevé que Carlos de Inglaterra y su esposa Camila sostengan un encuentro con Miguel Díaz-Canel, seguido de una cena privada en el Palacio de la Revolución, según reporta la agencia estatal Prensa Latina.
Durante su estadía, el heredero de la Corona británica y la duquesa realizarán una ofrenda floral a José Martí en la Plaza de la Revolución, visitarán centros de arte y proyectos comunitarios en barrios de la capital y asistirán a una gala de ballet en el Gran Teatro de La Habana.
Una de las actividades más anticipadas, será un encuentro con emprendedores del sector privado y miembros del club de autos clásicos de fabricación británica. Hasta el momento, no está previsto que los monarcas se reúnan con miembros de la oposición cubana.
La visita de Carlos de Inglaterra y Camila se lleva a cabo, en un momento de alta tensión entre el Gobierno de la Isla y la administración de la Casa Blanca, aliado internacional del Reino Unido.
Sobre todo, luego de que el líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, fuera designado por la Asamblea Nacional como presidente interino el pasado mes de enero.
Estados Unidos fue una de las primeras naciones en reconocer a Guaidól como representante legítimo del país petrolero, mientras que el régimen cubano respaldó a su aliado chavista Nicolás Maduro.
Incluso, el político estadounidense Rick Scott llegó a escribir una carta al príncipe británico donde pidió al monarca que no visitara Cuba. Según el republicano, esto representaría un apoyo al gobierno comunista de la Isla que “ha negado a los cubanos sus derechos básicos durante demasiado tiempo".
"Un viaje de esta magnitud por parte de la Corona otorga una legitimidad injustificada a una dictadura con una historia de décadas de persecución y encarcelamiento de sus desertores y represión de su gente", escribió el ex gobernador de Florida en la misiva.
Los rumores de la visita de sus Altezas Reales a la Isla habían comenzado a surgir desde diciembre del pasado año. La posibilidad también había salido a la luz en la reunión efectuada entre Carlos y Díaz-Canel, en Clarence House, durante el breve tránsito que hiciera el mandatario cubano en Londres al regreso de su gira por Asia.
Previamente, Carlos y Camilla visitaron algunas ex colonias británicas como Santa Lucía, Barbados, San Vicente y las Granadinas, San Cristóbal y Nieves, además de Granada.
La estancia del príncipe y la duquesa en Cuba, realizada “a solicitud del gobierno británico”, tiene como objetivo “resaltar la creciente relación bilateral con el Reino Unido y mostrar algunos de los vínculos culturales entre los dos países”, informó la embajada británica en La Habana.
"La visita real no se trata solo de hacer negocios: eso es solo un elemento de muchos. Pero sí creemos en apoyar un mayor comercio e inversión británica en Cuba", afirmó en Twitter, el embajador, Antony Stokes.
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