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La sede de la Asociación Hermanos Saíz de Sancti Spíritus se cae a pedazos aceleradamente

El burocratismo relacionado con la asignación del presupuesto sigue demorando su restauración.

Paredes con moho, repello explotado y pintura desteñida, en la sede de la AHS de Sancti Spíritus © Escambray / Lisandra Gómez
Paredes con moho, repello explotado y pintura desteñida, en la sede de la AHS de Sancti Spíritus Foto © Escambray / Lisandra Gómez

Este artículo es de hace 4 años

La Casa del Joven Creador, sede la Asociación Hermanos Saíz en Sancti Spíritus, no hay día en que no vea un nuevo destrozo causado por la dejadez de las autoridades, que están tardando más de la cuenta en acometer una restauración que el inmueble, del siglo XIX, está pidiendo a gritos.

Un reportaje de Escambray describe el deplorable estado de la construcción: “Moho que se ha extendido por gran parte de las paredes, cabillas desnudas en su techo, repello explotado y pintura desteñida” y de trozos de yeso de que de vez en vez caen estruendosamente al suelo, configuran el panorama.

“La casa está en un deterioro absoluto, sobre todo en las primeras habitaciones –dice Gustavo Ramos, su director desde hace dos décadas–. Resulta muy peligroso, porque en cualquier momento le puede caer encima un pedazo de yeso a alguno de los trabajadores y provocarle serias afectaciones. Además, se hace imposible trabajar cuando llueve, porque se moja más adentro que afuera. Si nos llega una vaguada, no sé qué pudiera pasar”.

La edificación fue Palacio de los Matrimonios hasta 1993. “Nos la entregaron en perfecto estado, pero después del 2008 comenzó a mostrar la necesidad de una reparación”, que según Ramos, hicieron ellos mismos. Sobre la situación actual ya han tomado nota los expertos en arquitectura, pero no se ha movido un dedo para asignar fondos y empezar a trabajar.

Rolando Lasval Hernández, responsable del Sectorial de Cultura y Arte en Sancti Spíritus, da una explicación algo enrevesada: “No estamos autorizados a intervenir con dinero líquido, pero sí con recursos y la realización de la contratación”.

Según dice, primero se dijo que las autoridades del Cultura locales asegurarían parte del dinero, “pero luego se acordó que la Dirección Nacional de la AHS pondría cerca de 30.000 pesos y nosotros contrataríamos con la divisa el grupo de restauración del Fondo Cubano de Bienes Culturales para hacer la impermeabilización y todo el trabajo de yesería y demás necesidades”.

Pero nada se avanzó. En 2018, la AHS obtuvo del gobierno provincial la promesa de que aportaría algún monto al proyecto de restauración, “pero no sería para ahora, pues existen inversiones planificadas con anterioridad”, dice una fuente de la organización juvenil.

Por su parte, el viceministro de Cultura, Fernando Rojas, aseguró, al ser contactado por Escambray, que le corresponde a la AHS cubrir monetariamente la mayor parte del proyecto de reparación.

El problema, dice el medio de prensa, es que “desde hace meses la AHS y todas sus filiales provinciales han sido objeto de una reestructuración en el proceso económico, lo que ha generado cambio de cuentas y llegadas tardías de los presupuestos mensuales para todos los gastos del quehacer de la organización”.

A lo que se ve, como sucede con muchas cosas en la Isla, el tema se ha vuelto una papa caliente que todos se pasan y que finalmente acaba cayendo al suelo. Justo donde terminará la Casa del Joven Creador.

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