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Los dorsales más grandes del deporte (Número 5)

El '5' de mi vida es un futbolista, pero tengo a tres peloteros entrañables.

El gran capitán culé, mi '5' preferido. © Twitter / Carles Puyol
El gran capitán culé, mi '5' preferido. Foto © Twitter / Carles Puyol

Este artículo es de hace 4 años

Esta es la quinta entrega de mi selección de los mejores dorsales del deporte. Pongo el parche de siempre: se trata de una lista muy personal mediada por preferencias que cultivé con transmisiones televisivas, en las gradas del estadio o a través de lecturas, documentales y películas biográficas.

5

CARLES PUYOL

Su fútbol no llevaba el cuño de La Masia. Limitado de técnica, Puyol carecía de gracia y toque delicado para cumplir las tradicionales exigencias azulgranas. Sin embargo, el melenudo de La Pobla de Segur se erigió, corazón mediante, en el mejor central de la historia del Barҫa. Tirios y troyanos lo vieron detener con el pecho el disparo del Lokomotiv, y proteger a Figo de la tempestad, y cederle a Abidal el privilegio de alzar la Orejona, y marcarle a Alemania de cabeza en las semifinales del Mundial de 2010. Nada lo derrotó jamás, ni las rodillas destrozadas, ni la maledicencia, ni el ingrato menosprecio. Un tipo imprescindible. Més que un capità.

Campeón del mundo en 2010, y de la Eurocopa en 2008. Incluido en el equipo del año de la UEFA en 2002, 2005, 2006, 2008, 2009 y 2010. Seis veces campeón de La Liga. Titular de Champions en tres ocasiones. Premio Príncipe de Asturias de los Deportes 2010 como integrante de la selección española.

Menciones

ALBERT PUJOLS

Hay pocas cosas más seguras que esta: cinco años después de que La Máquina le diga adiós al béisbol, entrará al templo sagrado de Cooperstown... Pobre del infeliz que no le dé su voto a uno de los mejores bateadores de la historia, un modelo de seriedad profesional que en sus primeras 11 temporadas fijó mínimos anuales de 32 jonrones y 99 remolques, con averages entre .299 y .359. Para mí, el latino más grande que ha pisado un diamante de las Ligas Mayores.

Tres veces MVP (2005, 2008 y 2009). Novato del Año. Diez presencias en el Juego de Estrellas. Dos anillos de Serie Mundial. Dos Guantes de Oro. Seis Bates de Plata. Sexto de todos los tiempos en cuadrangulares (645) y quinto en impulsadas (2022).

ANTONIO MUÑOZ

“Pocos jugadores han podido blasonar de tanto porte en un diamante, tanta elegancia para cumplir el trámite brutal de pegarle un garrotazo a la pelota”. Eso escribí una vez sobre el guajiro generoso que saltó de las brumas de Algaba a las luces del mundo beisbolero. De lejos -¡de lejísimo!- el mejor toletero zurdo de las Series Nacionales, Muñoz era esa especie rara que lo mismo lograba altos promedios que lideraba a los productores de jonrones. Sobre su página mejor en los diamantes, dije en el mismo texto: “Ese día, Muñoz se paró frente al submarino Yukio Takemoto y decidió un partido enmarañado con un cuadrangular inmenso que le sacó un orgasmo a todo un pueblo que requería un orgasmo para librarse de tensiones y asegurar el oro en un torneo donde Muñoz, antes de consumir su memorable turno al bate, le había dicho a Pedro Jova que encendiera un cigarro porque él iba a darle un batacazo al japonés y quería fumárselo después de celebrar la vuelta al cuadro”.

Ganó ocho títulos de jonrones en el país, y fue Jugador Más Valioso de la Serie Mundial Amateur en dos oportunidades. En los campeonatos domésticos todavía va primero en boletos (1551), segundo en empujadas (1407), tercero en campañas jugadas (24), cuarto en total de bases (3569), quinto en vuelacercas (370), sexto en anotadas (1281) y séptimo en dobles (355). Su línea ofensiva es de .302/.435/.535. Fue elegido al Salón de la Fama de Cuba.

JOE DIMAGGIO

Si tuviste un abuelo yanquista y pasaste tu infancia escuchando sus cuentos de pelota, tienes la obligación de adorar al Yankee Clipper. Dotado de las cinco herramientas, su carrera se vio partida en dos debido a la Segunda Guerra Mundial, pero así y todo se las ingenió para dejar su promedio ofensivo en .325. Jimmy Breslin lo metió en una frase inmarcesible: “El béisbol no son estadísticas, sino Joe DiMaggio doblando por segunda”.

Miembro del Hall de la Fama. Tres veces MVP (1939, 1941, 1947). All Star en cada una de sus 13 temporadas. Nueve títulos de Serie Mundial. Su racha de 56 juegos consecutivos bateando de hit está catalogada como el record más imponente de la MLB.

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Michel Contreras

Periodista de CiberCuba especializado en béisbol, fútbol y ajedrez.


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