Farah María cumplió 75 años este sábado y, aunque ya no se permite provocativos vestuarios y la sensualidad al cantar es cosa del pasado, sigue siendo imprescindible para una importante generación de cubanos que la recuerdan con afecto por su manera de proyectarse en escena.
La Gacela de Cuba, que nos remite al malecón habanero y sus tiburones en aquel tema grabado junto a la Orquesta Jorrín, supo incursionar en varios géneros de la música cubana e internacional. Para ella crearon compositores como Adolfo Guzmán, Juan Almeida, Meme Solís, Silvio Rodríguez y otros.
Los años no pasan por gusto, y el rostro lozano que debutó en el Festival Sopot 1977, en Polonia, es hoy solo una imagen a la que recurrir y una voz que nos regala, desde el pasado, títulos como Amor, amor, El recuerdo de aquel largo viaje o Juventud y experiencia.
El tiempo que quedó atrás quizás para Farah María sea tan enigmático como lo es para las generaciones que no la conocimos en su momento de esplendor. El Alzheimer no perdona y las lagunas en su mente cada día deben ser más grandes, aunque haya hecho, alguna que otra vez, apariciones en el escenario para recordarnos por qué muchos estuvieron a sus pies.
El mito, la leyenda y la realidad se juntan a su alrededor y los aplausos de su público, cada vez que reaparecía, son el mejor regalo que puede recibir alguien, que dejó a su paso una estela de admiradores a los que no les importa cómo se ve por fuera, sabe tenerla en el lugar que se merece.
Farah María vivió varios años en Madrid, España, hasta que -sabiéndose enferma- decidió regresar a Cuba, donde aún el público se emociona con...
...Solo el recuerdo de aquel largo viaje / mis manos vacías quedarán ya sin ti / solo el recuerdo de un día cansado / te espero sentada en la vieja estación / solo el recuerdo de aquel largo viaje / ahí esperaré mi amor.
Así, con el lenguaje de la música, Farah María no necesita subirse a los escenarios. Desde el sitio que habita en este viaje hacia el futuro, tiene reservado un puesto privilegiado entre esas figuras que han contribuido a que, en el pentagrama de Cuba, sea una referencia para muchos.
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