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Migrante cubano en México con esquizofrenia precisa del cuidado de sus seres queridos

Rubén Sosa Pérez, el migrante cubano cuya familia solicitó visa humanitaria para visitar en México, fue diagnosticado con esquizofrenia en la Casa de Psiquiatría de Reynosa. 

Rubén Sosa Pérez, antes y después en México. © Collage con Facebook
Rubén Sosa Pérez, antes y después en México. Foto © Collage con Facebook

Este artículo es de hace 4 años

Rubén Sosa Pérez, el migrante cubano cuya familia solicitó visa humanitaria en México para visitarlo, fue diagnosticado con esquizofrenia en la Casa de Psiquiatría de Reynosa.

"Él llegó muy mal, diciendo incoherencias horribles, queriendo golpear a todo mundo y estuvo sujetado de día y de noche. Él necesita tratamiento definitivamente. Lo tenemos medicado, hasta el momento está controlado", dijo Graciela González, jefa de enfermería de esa institución al medio local Hora Cero.

González agrega que al principio se le aplicó Zyprexa, un antipsicótico, porque "estaba muy mal, muy agresivo, alterado… es una esquizofrenia. También se le hicieron unos laboratorios", agregó.

De momento, este joven se encuentra hospitalizado en ese centro médico a la espera de que su hermano, cuñada y pequeño sobrino puedan llegar al norte de México. Estos se encuentran retenidos el Instituto Nacional de Migracion (INM) en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, al sur del país.

Eduardo Sosa Pérez lleva días pidiendo al gobierno de Andrés Manuel López Obrador un salvoconducto para poder recoger a su hermano hospitalizado. Según la enfermera solo lo pueden entregar a un familiar.

"Su hermano, en este caso, tendría que venir por él y nosotros se lo entregamos con tratamiento, porque va a seguir con tratamiento", señaló.

Eduardo afirmó al citado medio que se comunica tres o cuatro veces con el hospital y se enteró de que un coyote que llevaría a su hermano no explica por qué el migrante cubano quedó en ese estado.

"Hace como dos o tres meses yo perdí comunicación con él, porque el tema fue que un coyote a mí me estafó con tres mil dólares (cerca de 60 mil pesos mexicanos), entonces el coyote le estaba llamando a él, lo estaba amenazando, pidiéndole dinero y que le dijera dónde nosotros estábamos", especificó a Hora Cero.

El reportero de ese medio, José Manuel M Calderón, visitó a Rubén Sosa en la Casa de Psiquiatría de Reynosa.

En las redes sociales se sumó al llamado a las autoridades pertinentes para que permitan a la familia Sosa reunirse en ese territorio y ayudar al joven, quien "hace días era una persona completamente normal, pero sufrió una fuerte intoxicación y perdió el razonamiento", apuntó.

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