Las autoridades de Florida rechazaron una apelación del actor mexicano Pablo Lyle, quien enfrenta la justicia por el cargo de homicidio involuntario del cubano Juan Ricardo Hernández.
Otra vez los abogados de Lyle insistieron en el recurso de la defensa propia, alegando que el artista temió por la seguridad suya y de su familia después de un altercado en la vía con el cubano de 63 años, el 31 de marzo de 2019.
En consecuencia, presuntamente el mexicano decidió agredir a Hernández, propinándole así un fuerte puñetazo en la cabeza que provocaría la muerte del antillano tras una fractura de cráneo, 4 días después del incidente.
Los abogados de Lyle, sin embargo, volvieron a apelar a la ley de defensa propia Stand Your Ground del estado de Florida, que ya había sido desestimada anteriormente por el juez Alan Fine, reemplazado en el caso, a principios de 2020, por la magistrada Marlene Fernández-Karavetsos.
“La estrategia de los representantes del actor busca que la Corte de Apelación falle a favor de ellos y determinar que el juez Alan Fine no tomó una determinación correcta y lo que causa es que todos los argumentos se vuelvan a presentar de nuevo, se vuelvan a presentar los videos si es que la jueza los admite como evidencia o no y que todos los testigos se vuelvan a presentar con el fin de buscar su libertad en base a esa detención”, explicó la abogada penalista de Miami Sandra Hoyos, según el portal Infobae.
No obstante, la Corte de Apelaciones del Tercer Distrito en Florida se basó en los videos que recogen el suceso, así como en declaraciones de varias personas, para determinar que Hernández en ningún momento amenazó a Lyle.
Además, un testigo ocular expuso que el fallecido pidió a Pablo que no lo golpeara.
Basándose en tales argumentos, la Corte estableció que no hubo una amenaza inminente o uso de fuerza ilegal que justificara la violencia del artista, porque no había señal que lo hiciera sentirse amenazado.
Por su lado, la defensa de Lyle sostiene que el actor intentaba proteger a sus familiares ante la posibilidad de que el cubano estuviese armado o tomara otras represalias, como embestirlos con su vehículo en la carretera.
Los abogados del actor mexicano esperaban que, bajo la nueva perspectiva de Fernández-Karavetsos, el proceso en los tribunales tomara otro rumbo, más favorable que bajo la apreciación de Fine.
Recientemente, la defensa de Lyle interpuso una demanda al estado de Florida, argumentando que las autoridades competentes cometieron un error al negarle inmunidad al acusado.
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