Dayron Robles siembra yuca durante el confinamiento por el coronavirus

El atleta y campeón olímpico cubano Dayron Robles pasa los días de aislamiento social por el coronavirus entregándose a la tarea de sembrar yuca.

Por estas fechas se le ve con una indumentaria extraña en él, con botas y sombrero encasquetado para protegerse del sol, según refiere una entrevista del medio deportivo cubano Play Off.

“Es una inspiración personal, siempre quise poner el campo como parte de mi vida, poner cadenas productivas como parte de mi vida”, contó Robles a la citada publicación.

“Me encanta hacer el sacrificio general de las cosas: labrar, plantar la semilla, echarle el agua, cuidar de esa semilla, ver su surgimiento. El fruto a todo el mundo el gusta, pero esta parte del sacrificio, puesto en cualquier ámbito de la vida es interesante, porque después de que te sacrificas haciendo algo, cuando ves el resultado, creo que te sabe doble el éxito, lo disfrutas mucho más. Creo que al que le vaya a brindar un macito de lechuga, o un mango, se lo doy porque realmente conozco el sacrificio que deviene de aquella persona que trabaja el campo”, añade.

Play Off explica que esta actividad, por más llamativa que parezca a ojos de los lectores, no es completamente inusual en la vida del atleta, ya que él mismo se ha encargado de difundir en redes sociales imágenes o vídeos enfrascado en trabajos semejantes.

“¿Pensaron que ya habíamos terminado en el campo?!!! No, seguimos dando pelea, sembrando, recogiendo… Ojalá cuando todo esto pase podamos vernos de nuevo, para eso #QuédateEnCasa, escribió en Facebook el corredor cuya especialidad ha sido la prueba de los 110 metros con vallas.

Ahora alejado de la pista, Robles comenta: “Por supuesto, aquí estamos por la cuestión de la COVID-19. Como parte del eslogan mundial de quédate en casa, nosotros también lo hemos hecho muy propio y lo llevamos bien a cabo, haciendo uso del llamado del país de que todo el que tenga un pedacito de tierra, sacarle el mayor provecho para darle al vecino al amigo, a la placita, porque lo vamos a necesitar”.

“Mi familia y yo tenemos esta posibilidad y lo hacemos con bastante frecuencia en la vida normal: estar en este sitio, tratar de implementar el huerto que aquí tenemos y darle uso a los productos que nos da la tierra”, explica.

La otra faceta que muestra Robles es como emprendedor, a cargo del restaurante La Escondida Habana y de una propiedad en Airbnb. Una cosa se mezcla con la otra, ya que su trabajo en el campo favorece tener los recursos para abastecer sus negocios.

“Del huerto a la mesa es algo que funciona en el mundo entero y nosotros también tratamos de tenerlo como un uso normal”, dijo.

Robles igualmente hizo un llamado a que las personas comprendieran la importancia del aislamiento social en medio de la crisis sanitaria actual.

“Lo fundamental es que la gente entienda qué tan necesario es quedarse en casa, y que, para poder nosotros combatir en esa guerra, nuestro fusil es el aislamiento social, por eso exhorto a aquellas personas que aprecien su vida, y la vida de los demás, que amen y que les guste ser amados, que se queden en casa, que lo disfruten y que busquen alguna alternativa”.

En febrero de 2020, el vicepresidente cubano Salvador Valdés Mesa había hecho un llamado a aumentar las cosechas de yuca para alimentar a personas y animales en la isla, como forma de reducir importaciones en medio de la de la crisis productiva y de abastecimiento que vive la isla.

Entre la falta de alimentos, el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) informó este miércoles que se habían registrado 52 nuevos casos de coronavirus en el país, elevándose el total a 1189. Los 52 contagios añadidos a la suma fueron cubanos. De ellos, 43 tuvieron contactos con casos confirmados anteriormente y en 9 no se precisa la fuente de infección.

En la actualidad hay 3.425 pacientes que se encuentran ingresados en hospitales, 40 personas han fallecido y 341 han recibido el alta médica desde el inicio de la crisis sanitaria. Otras 5.497 personas se vigilan en sus hogares desde la Atención Primaria de Salud.

De los 1.189 pacientes diagnosticados con la enfermedad, 790 presentan una evolución clínica estable. Nueve están en estado crítico y siete se reportan como graves.