El primer grupo de 52 especialistas cubanos que se encontraban en Italia enfrentando al nuevo coronavirus regresó este lunes a la isla desde el aeropuerto de Milán, anunció en Twitter José Carlos Rodríguez, embajador de Cuba en ese país europeo.
36 médicos, 15 enfermeros y un especialista en logística fueron despedidos en horas de la mañana por el diplomático cubano y otras autoridades Lombardía, la región italiana que se convirtió en uno de los principales focos de contagio de la pandemia.
La brigada cubana permaneció durante dos meses en Italia, específicamente en el municipio de Crema, donde realizaron mas de cinco mil atenciones médicas, tres mil de enfermería y 210 altas, según datos oficiales del gobierno de la isla presentados por la agencia estatal de noticias Prensa Latina.
Hasta el momento no se ha mencionado nada sobre el segundo grupo de médicos de la isla que ofreció sus servicios en Piamonte, conformado por 38 personas (21 médicos, 16 enfermeros y un especialista en logística).
La presencia de los médicos cubanos en Italia estuvo durante todo este tiempo plagado de controversias y reclamos de la comundiad internacional, ya que el gobierno de Cuba envió 34 brigadas de médicos a 27 países, según datos oficiales del Ministerio de Salud Pública, para generar ingresos económicos ante la falta de turismo internacional provocada por el COVID-19.
El gobierno de Estados Unidos calificó la decisión como "tráfico de profesionales médicos" e instó a los países que alojan doctores cubanos "a proteger sus derechos".
"Exija a Cuba que deje de confiscar el pago y los pasaportes. Requerir prueba de credenciales médicas. Hacer públicos los acuerdos bilaterales. Las crisis no justifican el tráfico de profesionales médicos, que necesitan protección ahora más que nunca”, escribió en Twitter Michael G. Kozak, Secretario Adjunto en funciones de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.
Por su parte, el periódico español La Vanguardia reveló que el gobierno de Italia calificó de "nefasta" la experiencia del personal médico cubano, una información que se hizo pública cuando España barajó la posibilidad de contratar los servicios de Cuba para enfrentar la crisis sanitaria del COVID-19.
A finales de mayo regresó a la isla una parte de la brigada que se encontraba en Andorra, también enfrentando el nuevo coronavirus, mientras que el resto lo hará a mediados de junio, según revelaron fuentes locales.
Aunque el Principado de Andorra no reveló el costo total de la misión médica cubana, un portavoz anunció que la familia Sirk asumiría "todo el coste de los servicios".
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