El cubano Yordan Álvarez, quien fuera Novato del Año de la Liga Americana en 2019, regresó anoche a los diamantes y en la primera vez al bate descargó su furia sobre una recta que hizo un viaje de 343 pies hasta las gradas del left field.
El tunero ocupó el quinto turno, actuó como designado, y cerró de 4-1 con un total de cuatro remolques en la paliza de 11x1 de los Astros a los Marineros.
Aquejado de problemas ofensivos, Houston (que no había anotado en dobles dígitos en ningún desafío de la campaña), pedía a gritos el retorno de su figura sensación, que mejor no pudo corresponderle.
En ese juego también despachó la pelota el veterano Yulieski Gourriel, el cual añadió un triple en cuatro visitas oficiales al home plate.
Para él fue su cuarto bambinazo y el octavo remolque de este curso. El batazo se lo pegó a una slider de su compatriota Néstor Cortés -la misma víctima de la conexión de Álvarez-, y voló un estimado de 359 pies por el lado izquierdo del Minute Maid Park.
Por cierto, Cortés hizo una de las peores aperturas posibles al dominar a un solo bateador de los nueve que enfrentó. El joven zurdo soportó cinco hits (incluidos tres extrabases), regaló dos boletos, le marcaron ocho veces y siete de esas carreras fueron limpias. Ahora tiene efectividad de 15.26, con WHIP de 2.35.
Los restantes cubanos estuvieron como sigue: José Iglesias (Orioles), de 3-1 para dejar su línea en .380/.396/.540; Lourdes Gourriel (Azulejos), de 5-0, extendiendo una mala racha que ha visto descender su average a .241; y Yandy Díaz (Rays), de 1-0 y base por bolas.
En el caso de este último, su porcentaje de envasado de .410 es el séptimo más alto de la Americana.
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