Una mujer y su hijo de 9 años fallecieron este domingo en un barrio de República Dominicana a causa de las torrenciales lluvias asociadas a la tormenta tropical Laura, que ocasionaron el derrumbe de la vivienda.
Los hechos ocurrieron a las 3 de la madrugada en Los Palmeros, Santo Domingo, cuando la casa colapsó y dejó sepultadas a las víctimas, identificadas como Yilenia (37 años) y Darwin Frías (años), dijeron a la agencia de noticias EFE miembros de la Defensa Civil.
La familia intentó salvarse del derrumbe luego de que los vecinos les alertaran del peligro que corrían, pero quedaron atrapados bajo una pared de ladrillos.
A pesar de la labor de los rescatistas que acudieron al lugar, en horas de la mañana todavía el cuerpo del niño permanecía semisepultado bajo los escombros.
Esa nación caribeña se encuentra todavía bajo los efectos de la tormenta tropical Laura, que además ha ocasionado afectaciones en los servicios de agua y electricidad en numerosos sectores; y se han registrado deslaves y deslizamientos de tierra en varias regiones.
El centro de la tormenta tocó tierra en horas de la noche del sábado por el Este del país y permanecerá en ese territorio hasta horas de la tarde del domingo, según los pronósticos meteorológicos.
Actualmente el ojo de Laura atraviesa Puerto Príncipe, en la vecina Haití, informó la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) dominicana.
La tormenta se mueve hacia el oeste/noroeste a unos 30 km/h, con vientos máximos sostenidos de 75 km/h.
A pesar de que se va alejando las lluvias y los fuertes vientos mantienen en alerta a las 32 provincias de República Dominicana, 20 de ellas en alerta roja y el resto en amarilla, informó el Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
Ese organismo ordenó la víspera evacuar zonas de alto riesgo, y prohibió el uso de las playas y los deportes acuáticos en todas las costas del país.
La tormenta se aproxima al oriente de Cuba, por donde está previsto que entre este domingo para atravesar la isla desde la Punta de Maisí hasta la zona occidental.
Se prevé que Laura provocará en la mayor isla de las Antillas un incremento de las precipitaciones y fuertes vientos. Las marejadas también podrían ser intensas pero dependerán "de la evolución del evento".
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