Los gobiernos de México y Rusia han coincidido en rechazar la censura en redes sociales, tras el reciente cierre de cuentas de Donald Trump en plataformas como Facebook, Twitter y YouTube, entre otras.
Sin mencionar a Trump por su nombre, Andrés Manuel López Obrador ha dicho que no cree correcto que las empresas privadas se proclamen árbitros de lo que es aceptable para el consumo mundial, al tiempo que ha intensificado sus críticas a cualquier restricción en la libertad de expresión.
"No sé si ustedes han observado que desde que tomaron esas decisiones, la Estatua de la Libertad en Nueva York se está poniendo verde de coraje porque no quiere pasar a ser un símbolo vacío", dijo el presidente mexicano en su habitual conferencia de prensa matutina.
López Obrador dijo que no se debe incitar a la violencia, pero enfatizó que eso "no puede ser motivo para suspender la libertad de expresión".
El presidente mexicano anunció que ha contactado a los países del G20 y a otras naciones para trabajar en una propuesta conjunta contra la censura ejercida por empresas privadas.
"Les adelanto que la primera reunión que tengamos del G20 voy a hacer un planteamiento sobre este asunto", dijo el presidente mexicano, quien desde la semana pasada se ha manifestado reiteradamente en contra de la censura en redes sociales.
"Lo que queremos en México es que se garanticen las libertades. Cero censura. Prohibido prohibir", afirmó López Obrador, quien en 2006 lideró protestas masivas alegando que le habían robado la presidencia; una denuncia que repitió en 2012 al ser derrotado otra vez en las urnas.
Crítico de Trump mientras estuvo en la oposición, tras llegar al poder, en 2018, López Obrador ha intentado mantener buenas relaciones con el líder estadounidense.
Una "explosión nuclear en el ciberespacio"
El Gobierno ruso, por su parte, afirmó este jueves que la decisión de varias redes sociales de bloquear las cuentas del saliente presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a raíz del asalto al Capitolio por un grupo de sus seguidores, es comparable a una explosión nuclear en el ciberespacio.
"La decisión de las plataformas de Internet estadounidenses de bloquear al jefe de Estado puede ser comparada a una explosión nuclear en el ciberespacio. La destrucción no es tan terrible como las consecuencias", declaró la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zajarova, según revela la agencia rusa TASS.
La alta funcionaria ruso añadió que se trata de “un golpe a los valores democráticos declarados por los países occidentales", y opinó que "la modificación del mercado de medios y la gran migración digital ha comenzado".
Las palabras de Zajarova han llegado después de que Snapchat anunciara también su decisión de suspender "de forma permanente" la cuenta de Trump, "en aras de la seguridad pública" y por sus "intentos" de "difundir desinformación" e "incitar a la violencia".
Por su parte, YouTube anunció el lunes la suspensión del canal de Trump durante un periodo mínimo de una semana, al considerar que uno de los vídeos publicados recientemente incitó a la violencia, sin dar más detalles al respecto.
Previamente, Facebook había anunciado que suspendía la cuenta de Donald Trump "de forma indefinida", y Twitter la canceló de forma definitiva tras los sucesos en el Capitolio, que se saldaron con cinco muertos, incluido un policía.
Los gobiernos de Alemania y Francia también han mostrado su rechazo a la decisión de suspender las redes sociales del presidente norteamericano. La canciller alemana, Angela Merkel, considera que deben ser los legisladores y no las compañías privadas quienes establezcan las reglas que rigen la libertad de expresión en la nación.
Por su parte, el ministro de Asuntos de la Unión Europea, Clement Beaune, dijo que estaba "impactado" al ver que una empresa privada tomara una decisión tan importante.
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