El senador Rick Scott exhortó recientemente a la administración de Joe Biden a rechazar las políticas de apaciguamiento hacia el gobierno de La Habana que llevó adelante el expresidente Barack Obama durante su mandato.
“No podemos volver a las políticas de apaciguamiento de la era de Obama. La inestabilidad en América Latina está directamente ligada al régimen cubano. Estados Unidos debe continuar responsabilizando al régimen”, declaró Scott en su cuenta de Twitter el pasado sábado 20 de febrero.
Las palabras del senador aparecen tras el clima de inseguridad que se vive a un lado y otro del Estrecho de Florida como resultado de la revisión a las negociaciones con Cuba que ha emprendido la actual administración de Biden.
Grupos más conservadores radicados en el exilio claman el no retorno a la normalización, ya que las violaciones a derechos humanos de opositores son cada vez más frecuentes dentro de la isla.
Sin embargo, varios defensores del deshielo entre ambas administraciones ven en este restablecimiento de relaciones una ruta hacia el empoderamiento de la sociedad civil y la construcción de una democracia, lo cual implicaría inevitablemente el levantamiento del embargo económico.
La semana pasada un grupo de cubanos, en representación del exilio radicado en Estados Unidos, se reunió para discutir sobre estas cuestiones en el Museo Americano de la Diáspora Cubana, ubicado en el barrio de Coral Way, Miami.
El congresista Carlos Giménez explicó a la prensa que el grupo le pide a Biden que no levante las sanciones de Estados Unidos ni que normalice las relaciones con la isla comunista a menos que las autoridades acuerden liberar a todos los presos políticos, restaurar los derechos civiles y celebrar elecciones libres y democráticas.
“Necesitamos y queremos, exigimos una Cuba libre”, dijo Giménez.
El grupo está pidiendo a la administración de Biden que evite reflejar las políticas del ex presidente Barack Obama y que mantenga la designación de Cuba como estado patrocinador del terrorismo. La administración Obama había eliminado a Cuba de la lista en 2015 y el ex presidente Donald Trump agregó la designación el 12 de enero.
El alcalde de Miami, Francis X. Suárez, dijo que no cree que sea necesario revertir las políticas de Trump, a quien atribuyó el crédito de la reciente “expansión de la libre empresa en Cuba”. Aunque las reformas originales comenzaron en 2010 bajo Obama.
"Esas son políticas que han generado resultados y no veo una razón por la que debamos revertirlas", dijo Suárez y agregó que la postura también afecta a Venezuela y Nicaragua. “Sabemos que cuanto más rápido Cuba se convierta en una democracia, más rápido nuestro hemisferio se convertirá en una democracia”.
Además de Rick Scott, el también senador demócrata por Nueva Jersey, Bob Menéndez y la congresista María Elvira Salazar, enviaron mensajes a Biden para que priorizara los derechos humanos y evitara hacer concesiones unilaterales.
“Una de mis mayores prioridades será restaurar la promoción de la democracia y los derechos humanos como un componente central de la política exterior de Estados Unidos”, dijo Menéndez.
También asistieron el comisionado de Miami Joe Carollo y el alcalde de Hialeah, Carlos Hernández. Organizaciones pro democracia como la Fundación Inspire America y la Asamblea de la Resistencia Cubana ayudaron a organizar el evento.
A finales de enero, y a propósito de la recién investidura presidencial de Biden, el senador Rick Scott escribió un artículo de opinión para el Miami Herald instando al nuevo mandatario a defender una Cuba y América Latina libres, rechazando así las políticas de apaciguamiento de la administración Obama, “que no han contribuido en nada a la promoción de la libertad en Cuba”.
En el artículo de opinión, el senador Rick Scott escribió: “Los cubanoamericanos en Florida y en todo Estados Unidos quieren saber: ¿Cuál es el plan de Joe Biden para Cuba? Durante los últimos cuatro años, Estados Unidos ha adoptado una posición sin precedentes contra dictadores asesinos y ha responsabilizado a los regímenes opresores de América Latina y Cuba por sus amenazas a la seguridad regional y los abusos contra los derechos humanos.
Sobre el gesto del ex mandatario Donald Trump de incluir a Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo, Scott señaló:
"Este mes, el Departamento de Estado dio un paso importante al reincorporar a Cuba a la lista de patrocinadores estatales del terrorismo, un paso al que he instado durante años. Ahora, el presidente electo Biden debe dejar en claro que Estados Unidos no volverá a las políticas de apaciguamiento que envalentonan al régimen y lastiman al pueblo cubano”, escribió en enero el senador sobre la posibilidad de retomar negociaciones con la isla.
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