El congresista demócrata Eric Swalwell, quien se desempeñó como fiscal en el segundo juicio político a Donald Trump, presentó este viernes una demanda civil contra el expresidente por su responsabilidad en el asalto al Capitolio el pasado 6 de enero.
Además de a Trump, Swalwell está demandando a su hijo Donald Trump Jr., a su abogado Rudy Giuliani y al legislador republicano Mo Brooks, de Alabama, a quienes acusa de realizar acciones que llevaron al violento ataque del Día de Reyes.
El legislador por California y precandidato a la presidencia por el Partido Demócrata en 2020, presentó su demanda en una corte federal en Washington DC, en el que alega que los cuatro imputados violaron la llamada Ley del Ku Klux Klan -que data de la era de la Reconstrucción- al conspirar para interrumpir los deberes constitucionales del Congreso. También les atribuye cargos de negligencia, de incitación a disturbios y de infligir angustia emocional.
Según el documento de 65 páginas, las acciones de los dos Trump, del exalcalde neoyorquino Giuliani y de Brooks "dejaron en claro que representan un riesgo de incitar a la violencia política en el futuro".
"Como consecuencia directa y previsible de las acusaciones falsas e incendiarias de fraude y robo de los acusados, y en respuesta directa a los expresos llamamientos de los acusados a la violencia en el mitin, una turba violenta atacó el Capitolio de Estados Unidos", reza el texto.
El asalto al Capitolio dejó un saldo de cinco muertos, entre ellos un agente de policía, ya la investigación sobre los participantes ha generado más de 300 arrestos.
"Muchos participantes en el ataque han revelado desde entonces que estaban actuando según lo que creían que eran las órdenes del expresidente Trump al servicio de su país", añade el documento.
Swalwell reveló que él fue uno de los miembros del Congreso que quedaron atrapados en el inmueble cuando se produjo el ataque de los manifestantes. Precisó que todos temieron por sus vidas y "le escribimos a nuestros seres queridos en caso de que ocurriese lo peor".
"Los que tienen conocimiento dijeron que, durante este momento de horror nacional, Trump estaba 'encantado' y estaba 'desconcertado porque otras personas de su equipo no estaban tan emocionados como él'. Otros describieron a Trump como 'casi entusiasmado' por la violencia desplegada", sostiene el texto.
La denuncia persigue el pago de daños compensatorios, además de una declaración de que los acusados violaron la ley y la exigencia de que en el futuro avisen por escrito con siete días de antelación, antes de cualquier evento público relacionado con elecciones que se celebre en Washington.
Esta demanda se une a otra iniciada el mes pasado por el representante Bernie Thompson, un demócrata que preside la Comisión de Seguridad Nacional, quien acusa a Trump y a su abogado Rudolph Giuliani de conspiración para incitar los disturbios del Capitolio.
Esa querella también menciona a la organización de extrema derecha Proud Boys y a la milicia antigubernamental Oath Keepers como responsables de los hechos.
"La insurrección fue resultado de un plan cuidadosamente orquestado por Trump, Giuliani y grupos extremistas como Oath Keepers y Proud Boys, los que comparten la meta común de emplear la intimidación, el acoso y las amenazas para detener la certificación del Colegio Electoral", según alegaron los abogados.
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