Los duques de Sussex, el príncipe Harry y Meghan Markle, hablaron sin tapujos en la entrevista le concedieron a Oprah Winfrey y que se emitió este domingo en la cadena CBS. Una conversación en la que la pareja reveló el sexo del bebé que están esperando, profundizaron en los pensamientos suicidas de Meghan durante sus años en la Casa Real británica y también la verdad de su relación con su cuñada Kate Middleton.
El matrimonio no se dejó nada en el tintero en esta entrevista, que ofrecieron poco más de un año después de desvincularse de la familia real británica. La expectación era inmensa y es seguro que sus declaraciones van a tener infinidad de repercusiones.
Durante la esperada charla, Meghan abrió su corazón y reveló los difíciles momentos que pasó su salud mental mientras formaba parte de la Casa Real. Un tiempo en el que incluso pensó en quitarse la vida. "Simplemente ya no quería seguir viva", aseguró.
Tuve pensamientos suicidas constantes y claros
La exactriz de 39 años afirma que se sintió desamparada en el seno de la familia real y que le negaron ayuda cuando la pidió a "una de las personas de mayor rango de la institución" de la Casa Real.
"Nunca hicieron nada, así que tuvimos que encontrar una solución", añadió Meghan, haciendo referencia aparentemente a la decisión de apartarse de la monarquía y empezar una nueva vida. A pesar de lo sola que se sintió en esos momentos, ahora afirma que ha recuperado su salud mental y que siente que "merece la pena vivir".
Comentarios racistas
Otras duras declaraciones que dieron en la entrevista fue sobre su hijo Archie, que pronto cumplirá dos años. Meghan afirma que antes de nacer hubo "preocupación y conversaciones acerca de cuán oscura sería la piel" del pequeño. Sin embargo, no quiso revelar quien hizo esos comentarios porque sería un "escándalo".
Los duques de Sussex aprovecharon la ocasión para revelar que el bebé que esperan es una niña que nacerá durante el verano. La pequeña será hermana de su primer hijo Archie Mountbatten-Windsor.
La relación entre Meghan Markle y Kate Middleton
Meghan también se sinceró sobre su relación con Kate Middleton y sus supuesta rivalidad. A pesar de lo que aseguró la prensa británica sobre que Meghan había hecho llorar a Kate en la víspera de su boda, la duquesa de Sussex afirma que fue al revés y que fue Kate la que le sacó las lágrimas por un tema relacionado con los vestidos que iban a lucir en su boda.
"Me hizo llorar e hirió mis sentimientos", confesó Meghan. Sin embargo, añadió que Kate se disculpó por ese incidente y le envió flores.
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