El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, acusó este viernes al Gobierno de Cuba de ejercer el "terrorismo de Estado a quienes piensan distinto", e hizo un llamado a la comunidad internacional para "frenar a la dictadura" de la isla.
Almagro responsabilizó directamente al gobierno de Miguel Díaz-Canel de "la salud y el bienestar" de los 55 miembros de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) que están en huelga de hambre dentro de la isla, en protesta por la represión del régimen contra su proyecto humanitario.
"Una vez más la dictadura en Cuba revela su verdadera cara: la que reprime, la que oprime a quien piense diferente", indicó Almagro en una conferencia virtual que organizó Cuba Decide en conjunto con el líder de UNPACU, José Daniel Ferrer, que lleva una semana en huelga de hambre.
"Demandamos el fin de la represión, especialmente la violencia policial para suprimir el trabajo humanitario que realiza la Unión Patriótica de Cuba, de la que muchos de sus activistas se encuentra en las cárceles cubanas", apuntó.
Almagro llamó a la comunidad internacional a que se tomen acciones concretas para "terminar con la impunidad del régimen castrista en Cuba" y que los cubanos puedan "decir lo que piensan sin temor a ser perseguidos o encarcelados".
"Es hora de que la democracia retorne a Cuba", dijo Almagro, quien resaltó que "son varias las generaciones de cubanos y cubanas que han sido y son privados de sus derechos".
"Una dictadura de décadas, sin elecciones libres, sin libertades fundamentales, sin respeto por los derechos civiles, políticos, económicos, sociales, culturales".
A la huelga de hambre de UNPACU se han sumado 55 activistas en Cuba y ocho en el extranjero (tres en Suiza, tres en Estados Unidos, uno en Colombia y otro en Argentina). Los primeros comenzaron hace una semana, en protesta por el fuerte cerco policial que sufre desde hace 12 días la sede de esa organización en Altamira, Santiago de Cuba, donde reparten alimentos y ayuda a personas necesitadas, principalmente ancianos, madres solteras con niños pequeños y enfermos.
En la conferencia organizada por Cuba Decide, Ferrer dijo que no les quedó "otra opción" que hacer la huelga de hambre, porque ya no les queda otra recurso que sus cuerpos para denunciar y visibilizar tanta represión y acoso.
Ferrer también informó que una de las huelguistas tuvo que deponer porque empezó a bajarle mucho la presión, y que otros huelguistas están experimentando malestares físicos.
Durante la conferencia, intervinieron exiliados y expresos políticos cubanos que pidieron a la comunidad internacional no negociar con el Gobierno de Cuba.
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