Ciudadanos y policías marcharon juntos este miércoles por calles del condado de Miami-Dade, Florida, en contra de la violencia con armas de fuego, a través de la iniciativa Marcha por la Paz y Alto a la Violencia.
La marcha tiene el objetivo de alertar a la comunidad sobre los delitos con armas de fuego y la aplicación de la Ley, según comunicado del Departamento de Policía de Miami, difundido en su página de Twitter.
“La Marcha por la Paz y Alto a la Violencia ha comenzado. Llueva o brille el sol estamos unidos y haremos la diferencia", dice el mensaje que acompaña las fotos de los participantes bajo la lluvia por las calles del condado, donde las autoridades implementaron desde inicio del verano un operativo especial para acabar con los tiroteos.
Los participantes de la marcha, entre los que se encontraban miembros de la plataforma ciudadana We Stand 4 Justice, hicieron una parada en una calle del noroeste de Miami para recordar a Chassidy Saunders, el niño de 6 años que murió tras una balacera iniciada desde un vehículo afuera de una fiesta de cumpleaños, según NBC 6.
Crystal Foster, activista de We Stand 4 Justice, recordó en ese momento que “todas las vidas importan, pero cuando matas a un niño eso está en un nivel completamente diferente. Este menor no tuvo la oportunidad de vivir su vida",
Según Morris Copeland, director de los servicios comunitarios de Miami-Dade, desde que comenzó la “Operación Verano Caliente” no han tenido ningún tiroteo importante, aunque en las tres últimas semanas sí se ha registrado un aumento de los delitos con armas de fuego.
De acuerdo con reportes de Local 10 News, la policía desde que comenzó este operativo especial ha confiscado unas 200 armas, entre rifles y pistolas.
Igual se han realizado más de 400 arrestos por delitos graves, además de incautar municiones y drogas en las calles.
La policía de ese condado aún investiga el tiroteo ocurrido recientemente en los exteriores de un local en Kendall, al suroeste de Miami, donde se celebraba una fiesta de graduación.
Allí fallecieron tres personas, incluida una joven de 20 años, identificada como Tyleisha Taylor, oficial de correccionales de Florida que pasaba por el lugar.
A tan solo una semana de este tiroteo, ocurrió otro cuando varias personas salían de un concierto de música urbana en el salón de banquetes El Mula, en la ciudad de Hialeah, aledaña a Miami, que dejó un saldo de tres muertos y 20 heridos.
"Estamos realmente cansados de eso y sabemos que, si trabajamos juntos, definitivamente podemos mitigarlo y, con suerte, erradicarlo de nuestra comunidad", aseguró Copeland.
Para enfrentar esta violencia en escalada, la pasada semana las autoridades aprobaron un presupuesto de 90 millones de dólares para combatir el crimen a través de programas comunitarios.
Según la alcaldesa del condado, Daniella Levine Cava, este programa será a largo plazo. En el mismo se incluye el seguimiento a los delincuentes por Internet y las instalaciones de más cámaras de vigilancia.
Miami-Dade es el condado más poblado de Florida, con casi tres millones de habitantes, y donde se registran también la mayor cantidad de estos hechos violentos.
En 2020, año marcado por la pandemia de Covid-19 y las tensiones con la policía, los asesinatos con armas de fuego se fueron al alza en este condado, según los registros de la Fiscalía estatal.
En ese año ocurrieron 272 homicidios, un incremento significativo si se comparan con los datos de 2017, año en el que se registraron 232 asesinatos solo en ese condado.
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