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Residentes de edificio en peligro de derrumbe en La Habana lanzan las heces por los balcones

Hace años, el sistema sanitario del inmueble colapsó y el desborde de las desechos obligó a cerrar una heladería en los bajos de la construcción.

Edificio1353 de la Calzada de 10 de Octubre. © YouTube / CubaNet
Edificio1353 de la Calzada de 10 de Octubre. Foto © YouTube / CubaNet

Este artículo es de hace 2 años

Inquilinos del edificio 1353 de la Calzada de 10 de Octubre, en la barriada de La Víbora, en La Habana, se ven obligados a lanzar sus heces fecales por los balcones ante la falta de solución a las tupiciones y otros problemas de los baños colectivos. También temen que, de un momento a otro, la estructura se desplome y los sepulte entre los escombros.

En declaraciones al medio independiente CubaNet, los residentes del inmueble comentaron que pasan las noches alertas ante el peligro de derrumbe.

“Dormimos como el cocodrilo, con un ojo abierto y otro cerrado, porque todos los días aquí se cae un pedazo. Los arquitrabes se están cayendo, el falso techo también, debido al deterioro del edificio”, dijo Esteban Morejón, uno de los afectados.

“Están esperando que nos caiga el edificio arriba, para que nos resuelvan el problema, si alguien queda para hacer el cuento”, denunció. Ada Rodríguez dijo que por el inmueble corren “chorreras” de agua y tuvo que cubrir su televisor con nailon para que no se mojara. “La situación es crítica. Nos acostamos pensando que no vamos a amanecer”, expuso.

Por otro lado, Tania Otero significó que “incluso los muchachos no pueden ni estar jugando en el pasillo, porque casi todos los días se cae un pedazo de techo”. Una parte de su barbacoa tiene paredes rajadas.

Los baños del edificio eran colectivos y tuvieron que cerrarlos por la tupición, explica Morejón. Yolanda Vargas, quien padece de esquizofrenia paranoica, aseguró que las condiciones del edificio habían empeorado su estado al no tener siquiera donde hacer sus necesidades fisiológicas. Según comentó, debían tirar las heces fecales por los balcones.

“Yo vivo aquí desde los 16 años y estoy oyendo que van a dar casa hace mucho tiempo, pero todavía no se soluciona nada”, dijo otra vecina. “Donde quiera que vamos es lo mismo. Nunca le dan solución”, expone.

Construido en 1903 con viguetas, bobadillas y ladrillos refractarios, el edificio constaba de una amplia cuartería, un área para la elaboración de alimentos y dos baños públicos: uno para damas y otro para caballeros.

En los bajos, durante años, el inmueble acogió una heladería que llegó a gozar de cierta fama entre los vecinos, menciona el reporte de CubaNet. Sin embargo, debido al colapso de los servicios sanitarios, en 1998 las autoridades ordenaron el cierre del llamado Coppelita.

“Llovían aguas albañales. Lo mismo caían granos de frijoles que restos de excrementos”, evocó Gallardo. “Poco a poco comenzó a pasar lo mismo en los pisos superiores, lo peor es cuando cae algún aguacero porque se inunda todo. En mi cuarto el agua sube hasta 20 centímetros”, dijo.

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Maykel González

Periodista de Cibercuba. Graduado de Periodismo por la Universidad de La Habana (2012). Cofundador de la revista independiente El Estornudo.


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