Organizaciones nacionales e internacionales pidieron al gobierno de Honduras que decrete el estado de emergencia humanitaria por la afluencia masiva de migrantes en el país centroamericano.
Las organizaciones de la Sociedad Civil hondureña firmaron un comunicado oficial en el que piden que se decrete el estado de emergencia humanitaria. Entre los firmantes están la Asociación de Organismos No Gubernamentales ASONOG, el Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos CIPRODEH, y el Foro Nacional para las Migraciones en Honduras FONAMIH.
El texto explica que cruzaron la frontera oriental de Honduras cerca de siete mil personas de distintas nacionalidades en condición irregular, durante los primeros tres meses de 2022. Denuncian que esos migrantes se encuentran en extrema vulnerabilidad.
Las organizaciones destacaron que es necesario decretar el estado de emergencia para activar lo antes posible mecanismo de respuesta en las instituciones del Estado hondureño y que se articulen acciones con apoyo de la sociedad civil y organismos internacionales.
"Esta respuesta implica atención a la población migrante (...); respeto a los principios de acción sin daño, interés superior de los niños y las niñas, la no devolución y acceso a procedimientos de las personas solicitantes de asilo, atención inmediata a las víctimas de trata y tráfico de personas, entre otros", explican.
Las organizaciones señalaron que se trata de un llamado urgente al Estado de Honduras y exhortaron al Parlamento de ese país a impulsar "reformas inmediatas" a la Ley de Migración y Extranjería. En este sentido consideran necesario exonerar el cobro de multas, que ronda los 220 dólares, a los migrantes que ingresan de modo irregular al país.
Exigieron que los operadores de justicia atiendan y den respuesta inmediata "a las denuncias realizadas por las distintas organizaciones y las propias personas migrantes, quienes son víctimas de exacciones ilegales, agresiones físicas y verbales, trata, tráfico de personas, entre otras violaciones a sus derechos humanos".
Pidieron también al Estado de Honduras que incluyan en sus programas de trabajo en el área de Migración, acciones para sensibilizar a la población, autoridades e instituciones, en la lucha contra la xenofobia y la discriminación.
Esta semana un grupo de 50 emigrantes cubanos fueron detenidos en un municipio de Honduras fronterizo con Nicaragua.
La detención se produjo en el momento en que eran trasladados de forma irregular en un camión por dos residentes en la zona, en lo que la Policía hondureña denominó "Operación Escorpión" en el municipio de Danlí, departamento de El Paraíso.
Los ciudadanos hondureños que fueron detenidos con el grupo de cubanos, tienen 30 y 32 años y podrían ser juzgados por cargos de tráfico de personas.
A inicios de marzo las autoridades de Honduras detuvieron en dos operaciones similares, a 241 emigrantes cubanos. La Policía Nacional indicó que el primer grupo de 116 migrantes viajaba con seis nacionales. El segundo grupo era de 125 cubanos y viajaban con otros tres hondureños.
Ambas operaciones fueron organizadas por la policía en el municipio de Danlí, zona fronteriza con Nicaragua, país que no exige visado a los cubanos y que es utilizado como ruta para llegar cruzando fronteras hasta Estados Unidos.
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