Un niño de nueve años de la escuela Robb Elementary, en Uvalde, Texas, dio un desgarrador testimonio de cómo sobrevivió a la masacre en su escuela de este martes.
El menor James Luna contó a la Voz de América lo que sucedió en la escuela cuando irrumpió el tirador de 18 años, Salvador Ramos, quien ultimó a 19 menores y dos adultos, además de herir a otras 17 personas.
El pequeño relató que “era un día como cualquier otro. Estábamos afuera, en el recreo, y nuestro entrenador dijo que entráramos, ahí fue que escuchamos tres disparos y luego solo escuchamos gritos. Me siento feliz porque sobreviví”.
El padre de James también comentó visiblemente emocionado al citado medio que “el niño pasó por una tragedia que no debía pasar, gracias a Dios que está bien”.
También en el reporte, el teniente Criss Olivares, del Departamento de Seguridad Pública, de Texas, declaró que “hemos confirmado la muerte de 19 niños y de dos adultos, además de otros 17 heridos en esta horrible tragedia”.
Olivares dijo, además, que aún no se sabe qué motivó al atacante, quien fue abatido por la policía.
El oficial apuntó sobre Ramos que vivía ahí en Uvaldo con sus abuelos y que asistía a una escuela pública de la zona, pero “no hemos podido identificar a ningún amigo ni novia y sabemos que no tenía antecedentes penales ni afiliación a pandillas”.
Tras la tragedia de este martes en la escuela primaria Robb en Uvalde, Texas, los distritos escolares de ese estado han reforzado la seguridad de sus centros con más patrullas de policías.
Este miércoles trascendió que un estudiante de la secundaria Clear Brook, en Texas, fue detenido por llevar un arma descargada a la escuela, apenas 24 horas después del tiroteo en Robb Elementary.
La secundaria fue cerrada de inmediato como medida preventiva para que la policía pudiera buscar algún tipo de munición escondida, tras el arresto del estudiante en horas de la mañana, comunicó el Distrito Escolar Independiente de Clear Creek.
El gobernador de Texas, Greg Abbott dijo sobre el causante de nueva esta tragedia que “entró a la escuela con una pistola, y posiblemente un rifle, y abrió fuego”.
También comentó que “cuando los padres dejan a sus hijos en la escuela, tienen todas las expectativas de saber que podrán recoger a sus hijos cuando termine el día escolar".
“El estado de Texas está de luto con ellos por la realidad de que estos padres no podrán recoger a sus hijos”, agregó Abbott.
La escuela Robb Elementary está a unas 85 millas de San Antonio y es un colegio que acoge principalmente a estudiantes latinos de segundo a cuarto grado.
Este es el tiroteo escolar más mortífero en Estados Unidos desde 2012, año en el que un hombre armado asesinó a 26 niños de tan solo seis años en la Escuela Primaria Sandy Hook en Newtown, Conn, según la plataforma EducationWeek,.
El tiroteo ocurrido el 18 de mayo de 2018 en la escuela secundaria de Santa Fe era hasta ahora el último incidente de este tipo reportado en Texas. Ese día un estudiante de 17 años disparó y mató a diez personas e hirió a otras 13.
Pero desde ese año a la fecha, han ocurrido 119 tiroteos en escuelas estadounidenses que hirieron o mataron a personas, de acuerdo con EducationWeek.
"En ese mismo período, el mayor número de heridos y muertos se produjo en el tiroteo de Parkland (Florida), donde murieron 17 y 17 resultaron heridos", resalta además esa plataforma.
Desde 1970 han ido escalando los incidentes en centros educacionales, incluidos suicidios, homicidios y disparos accidentales, según el Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU.
También el Buró Federal de Investigaciones (FBI) reveló que en 2021 en Estados Unidos tuvieron lugar 61 tiroteos activos, cifra que representa un 50% más sobre el total del año anterior.
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