Un peculiar fenómeno atmosférico, conocido como "agujero fallstreak", fue detectado este viernes en el cielo de la ciudad de Matanzas.
“El 'skypunch' o 'agujero fallstreak' es un agujero en el cielo, representa un gran vacío de forma elíptica o circular que puede aparecer en las nubes medias como los altocúmulos (nubes de tamaño medio, de blancas a grisáceas, en forma de capas o parches)”, explicó el meteorólogo Henry Delgado Manzor en su cuenta de Facebook.
De acuerdo con el especialista cubano, “este curioso fenómeno se produce cuando la temperatura del agua de las nubes está por debajo de los cero grados Celsius, pero el agua no se ha congelado aún debido a la falta de partículas de nucleación de hielo”.
Delgado Manzor explicó en su post que “cuando se forman los cristales de hielo, las gotas de agua de alrededor de los cristales se evaporan, lo que deja ese enorme agujero en el cielo” y que “su apariencia inusual y su proceso de formación no son exclusivas de una única zona geográfica”.
El meteorólogo agregó que estos fenómenos “no son tan usuales como nos gustaría, pues observarlas es todo un espectáculo para los amantes de las nubes”. Asimismo compartió una foto del "agujero fallstreak", detectado en la mañana de este viernes y una imagen satelital que permite ver la peculiar formación de nubes.
Más de 240 de internautas reaccionaron a la publicación, replicada además en la página del Gobierno matancero en la red social y cerca de 100 comentaron el post, asombrados por la belleza de este tipo de acontecimientos atmosféricos.
"Muy interesante, creo que incluso había visto una formación como esa sin saber exactamente que era, muchas gracias por la información”, “Es precioso el cielo con esas nubes así, parece una pintura”, “La naturaleza nos sorprende en el momento menos esperado”, afirmaron algunos usuarios de la red social.
Otra forista incluso preguntó a Delgado Manzor si la ocurrencia del "agujero fallstreak" podría ser el antecedente de algún otro fenómeno, a lo que el especialista respondió que no y que su aparición sólo está determinada por la presencia de las características adecuadas en la atmósfera.
Mientras esto sucedía en el cielo de Matanzas, en La Habana se reportó este viernes la presencia de una cortina de “praecepitatio”, la cual surgió a partir de senderos de precipitación inclinados o verticales, unidos a la base de la nube y que se extienden hasta llegar a la superficie de la tierra o el mar.
Según el reporte de Cubadebate, “la característica de las nubes praecipitatio abarca todos los tipos de precipitaciones que caen, como lluvia, llovizna, nieve, aguanieve, granizo, etc. El tipo de precipitación resultante depende de las temperaturas de las diversas capas de aire por las que cae la precipitación en su viaje desde la nube hasta el suelo. Solo cuando la precipitación alcanza el nivel del suelo, se considera praecipitatio”.
Un fenómeno atmosférico que también impresionó a los matanceros tuvo lugar el pasado 28 de abril. En esa ocasión se trató de un parhelio, que según Delgado Manzor constituye una rareza óptica a partir de "resplandores que se forman a ambos lados del Sol cuando hay nubes del tipo Cirrus".
"Los rayos solares inciden sobre los cristales de hielo que conforman esta nube, estos actúan como prisma y se refractan. Esta nube se encuentra en la capa alta de la Troposfera, entre los 8 y 12 kilómetros de altura, donde la temperatura se encuentra entre los -40 y -60 grados Celsius", añadió.
El mismo día de este acontecimiento ocurrió un halo solar, evento más conocido pero igual de hermoso e impresionante. El peculiar fenómeno, formado a partir de la presencia de nubes cirrus, fue visible en La Habana y algunos territorios del occidente de la isla.
Pocos días antes, ocurrió otro halo en Holguín y Gibara, ciudades donde sus residentes fueron testigos privilegiados del curioso suceso natural, que se percibe como un arcoíris circundando el sol.
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