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Campaña de recaudación en ayuda a familiares de maestra asesinada en Texas supera los dos millones de dólares

Su esposo Joe García falleció de un infarto dos días después.

Irma y Joe García © GoFundMe
Irma y Joe García Foto © GoFundMe

Este artículo es de hace 1 año

Más de dos millones de dólares se han recaudado en una campaña de GoFundMe para apoyar a los cuatro hijos de Irma García, una de las maestras asesinadas en la masacre de la escuela primaria Robb, en Uvalde, Texas.

García, de 46 años, era muy apreciada en su comunidad y llevaba trabajando en la escuela más de 20 años.

Dos días después del tiroteo en la escuela, el más mortífero en la historia de Texas, el esposo de Irma, Joe García, murió de un ataque al corazón "debido a la pena", comunicó la familia.

El dinero de la campaña, impulsada por la prima de la maestra, Debra Austin, irá destinado en su totalidad a la familia García para cubrir gastos funerarios de Irma y Joe, y apoyar a los cuatro hijos que les sobreviven.

"Irma era esposa, madre de cuatro hijos, prima, hermana, hija, tía y una persona maravillosa. Literalmente haría cualquier cosa por cualquiera... sin hacer preguntas. Amaba a los niños de su clase y murió tratando de protegerlos. Por favor, done todo lo que pueda para ayudar a su familia. El 100% de lo recaudado se destinará a la familia García para diversos gastos. Gracias y Dios te bendiga", se lee en la descripción de la campaña.

"Por favor mantenga a nuestra familia en sus pensamientos y oraciones. Realmente creo que Joe murió con el corazón roto y perder al amor de su vida durante más de 25 años fue demasiado para soportar".

Además de Irma García y de los 19 niños de cuarto grado que fallecieron durante el tiroteo, también fue asesinada la maestra Eva Mireles, de 44 años, quien fue identificada como la primera víctima fatal.

Era maestra de cuarto grado en la escuela primaria Robb desde hacía 17 años. Le sobreviven su esposo, agente de la policía de Uvalde, Texas, y una hija que es estudiante universitaria.

El tiroteo, perpetrado por el joven de 18 años Salvador Ramos, dejó además 17 heridos, de los cuales seis continúan hospitalizados, entre ellos su propia abuela, a quien disparó antes de salir para la escuela.

La señora se encuentra en estado crítico producto de un disparo en el rostro, pero pudo avisar a la policía pocos minutos después de que Ramos saliera de casa.

La masacre puso nuevamente sobre la mesa de debate el tema del control de armas en Estados Unidos. Grupos que abogan por el control de armas exigieron al presidente Joe Biden levantar el obstruccionismo del Senado si es necesario y emitir una orden ejecutiva sobre la verificación de antecedentes para la compra de armas de fuego si los legisladores no aprueban una ley que reduzca las lagunas en la normativa actual.

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