La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (USBP) detuvo este miércoles a 32 balseros cubanos que habían desembarcado en una isla, cerca de los cayos de Florida.
Tras quedar varados en la isla, los migrantes fueron rescatados por agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y de la Guardia Costera (USCG), quienes los entregaron a la custodia de la USBP, informó en Twitter Walter N. Slosar, jefe de la Patrulla Fronteriza del Sector Miami.
Más temprano este miércoles, la USBP detuvo a 11 balseros cubanos que tocaron tierra cerca de Cayo Marathon. Estos migrantes podrán ser procesados por las autoridades, pero no ocurre así con los interceptados por la USCG en el mar.
Las imágenes mostraron a 10 hombres y una mujer, con los pies enfangados. En una de las fotos posteadas por la USBP se ven a todos sentados dentro del camión.
También este miércoles, tripulaciones de la Guardia Costera impidieron que dos botes con migrantes cubanos desembarcaran en Cayo Marquesas.
De acuerdo con las imágenes, se trataba de un bote rústico donde viajaban al menos 11 personas. La segunda embarcación era de color verde, pero se desconoce el número de balseros que iban a bordo porque la imagen fue tomada tras la detención de estos.
La crisis migratoria cubana es evidente en las costas de Florida, donde casi diariamente se reportan nuevos desembarcos o detenciones en el mar.
La víspera un agente de la Guardia Costera relató que en un vuelo de cinco horas pudo encontrar hasta cuatro embarcaciones cubanas y haitianas intentando llegar al sur de Florida.
El pasado año fiscal, concluido el 30 de septiembre, registró un acumulado de 6,182 cubanos interceptados en el mar en su intento de arribar a costas estadounidenses. Desde el 1 de octubre de 2022, las tripulaciones de la USCG ya han interceptado a 962 balseros de la isla, cifra que no contempla los que tocan tierra.
Por las fronteras terrestres también se alcanzaron cifras récord el pasado período fiscal, con un total de 224,607 migrantes cubanos que solicitaron asilo desde el 1 de octubre de 2021 hasta el 30 de septiembre de 2022.
En ese contexto EE.UU. ha intentado desalentar la emigración ilegal por mar y tierra.
La semana pasada el teniente Matt Miller de la USCG recordó que “la política comúnmente conocida como Pies secos, pies mojados, fue derogada en 2017” y citó al secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas, quien el pasado año declaró que “a las personas que lleguen ilegalmente por mar no se les permitirá quedarse”.
Sin embargo, los migrantes que tocan tierra, como los 32 recién llegados, son procesados por las autoridades migratorias y pueden presentar un caso de asilo.
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