Donald Trump se prepara para lanzar este martes su tercera campaña a la Casa Blanca, luego de unos resultados fallidos en las elecciones de mitad de período y la aparición de un nuevo liderazgo en el Partido Republicano, con la figura del gobernador de Florida, Ron DeSantis.
Se espera un anuncio a las 9 p.m. (EST) del martes desde su club en Palm Beach. “¡Ojalá mañana sea uno de los días más importantes en la historia de nuestro país!”, escribió Trump en su red social este lunes.
Sin embargo, el anuncio se podrá ver empañado por los resultados de las pasadas Midterms, unas elecciones que Trump pensaba aprovechar para relanzar su carrera hacia la Casa Blanca, pero que ha dejado malestar y desconcierto entre las filas republicanas, que le culpan por las fallidas candidaturas que el expresidente apoyó.
Sin el control del Senado y con un conteo que deja abierto el balance de fuerzas en la Cámara, la posible candidatura de Trump se verá desafiada por posibles retadores en el seno de los republicanos.
Además, Trump enfrenta una serie de investigaciones criminales cada vez más avanzadas, incluida una del Departamento de Justicia sobre los cientos de documentos clasificados que se encontraron en cajas y cajones en su club Mar-a-Lago.
Asistentes y aliados habían instado a Trump a esperar para anunciar sus planes hasta que terminaran las elecciones intermedias y el recuento de la segunda vuelta de las elecciones al Senado del 6 de diciembre en Georgia, según AP.
Pero el impaciente y mediático Trump también busca evitar que se haga más larga la lista de posibles retadores, incluido el gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien logró la reelección la semana pasada y ahora muchos en su partido lo ven como firme candidato a postularse para presidente.
Aunque conserva seguidores, son varios los republicanos que prefieren pasar página con Trump, entre ellos, la senadora Cynthia Lummis. Ante la pregunta de los periodistas el lunes sobre si apoyaba a Trump, la senadora de Wyoming dijo: “No creo que esa sea la pregunta correcta. Creo que la pregunta es, ¿quién es el líder actual del Partido Republicano?”. Cuando le hicieron la pregunta “correcta”, la senadora respondió: “Ron DeSantis”.
Por su parte, el senador Mitt Romney, republicano por Utah, crítico del expresidente desde hace mucho tiempo, comparó a Trump con un lanzador que sigue perdiendo después de las decepciones que se llevó el Partido Republicano en 2018, 2020 y ahora en 2022.
“Ha estado en el montículo y perdió tres juegos seguidos. Si queremos empezar a ganar, necesitamos a alguien más en el montículo. Y tenemos un banquillo muy fuerte que puede salir”, dijo Romney. “Lo sé, hay algunos fanáticos que lo aman. Al igual que, ya sabes, un lanzador envejecido, siempre hay fanáticos que quieren mantenerlos allí para siempre. Pero si sigues perdiendo juegos, trata de poner nuevos jugadores en el campo”.
Incluso los aliados de derecha del expresidente en el House Freedom Caucus mantuvieron su distancia ante las insinuaciones de Trump. “Estoy concentrado en lo que está sucediendo aquí”, dijo el representante Scott Perry, republicano por Pensilvania, presidente del Freedom Caucus, cuando los legisladores regresaron al Capitolio el lunes. “Simplemente no estoy prestando atención a ninguna de esas cosas, así que no quiero comentar sobre eso”, añadió.
Mientras tanto, en Utah, 86 legisladores republicanos enviaron el lunes un comunicado de prensa instando a DeSantis a postularse, lo que refleja su descontento por tener a Trump como abanderado de su partido. La mayoría mormona del estado se ha mostrado escéptica durante mucho tiempo sobre el aislacionismo y el lenguaje obsceno de Trump.
Trump, cuyo mandato terminó con sus seguidores asaltando violentamente el Capitolio y será recordado como el primero que se sometió a dos impeachments, pretende igualar el récord de Grover Cleveland, el único presidente en la historia de Estados Unidos que ha sido elegido para dos mandatos no consecutivos: en 1884 y 1892.
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