Los médicos del Hospital Provincial "Carlos Manuel de Céspedes", de Bayamo, no pueden trabajar en condiciones porque carecen de agua potable, denunció una doctora de esa institución sanitaria.
La doctora cubana Noeima Rodríguez recibió desde Cuba la denuncia hecha por una compañera de trabajo, alarmada por la situación.
"El hospital Céspedes amaneció sin gota de agua. Los médicos que salieron de guardia no pueden beber agua porque los vasos están sucios desde el desayuno y no los han podido fregar, los baños están prácticamente sellados a esta hora, el salón de operaciones parado porque no hay ropa limpia ni con qué lavarse las manos", escribió la mujer, que pidió no ser identificada por temor a represalias.
Rodríguez recordó cómo las denuncias en redes sociales de la crítica situación del Sistema de Salud Pública en Bayamo, y especialmente del hospital provincial, le costaron el acoso de la Seguridad del Estado, obligándola a exiliarse en Estados Unidos, a donde llegó con sus hijos en octubre pasado.
Noeima Rodríguez, miembro del Gremio Médico Cubano Libre, fue detenida arbitrariamente e intentaron fabricarle un delito por presuntas agresiones, todo por formar parte de la sociedad civil independiente y denunciar la crítica situación de la salud pública en el país.
La falta de calidad en el servicio del hospital provincial de Granma no es reciente y en varias ocasiones las redes sociales han servido para visibilizar los problemas de ese lugar.
En mayo de este año se conoció que estaba roto el único equipo de ultrasonidos que había en el hospital, una situación que generó incertidumbre entre los pacientes, porque su salud estaba en riesgo al no poder cumplir con todos los análisis indicados por los especialistas.
Desde 2018, antes de que comenzara la pandemia del coronavirus, se aquejan pacientes y trabajadores de la falta de materiales, medicamentos y condiciones. Un reporte de CubaNet mostró niños ingresados en los pasillos por escasez de camas en las salas, tuberías y desagües con salideros y filtraciones en los techos.
Recientemente falleció en ese hospital un joven de 29 años, Gualberto Risco León, presumiblemente por una negligencia médica ya que le detectaron que tenía el dengue y recibió una inadecuada atención, según la versión de su esposa.
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