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Las Tunas se queda sin papel para imprimir comprobantes de pago del servicio de agua

La Empresa de Acueducto trabaja para que los clientes pueden pagar con la plataforma electrónica Transfermóvil, pues cada mes gasta 30 cajas de hojas de papel para imprimir los talones de cobro.

Contador de agua © Agencia Cubana de Noticias
Contador de agua Foto © Agencia Cubana de Noticias

Este artículo es de hace 1 año

Las Tunas se quedó sin papel para imprimir los comprobantes de pago del servicio de abasto de agua potable al sector residencial.

Kenia Almira García, directora de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado (EAA), informó que por la carencia de ese recurso no pudieron disponer a tiempo de las tradicionales constancias.

"Por eso, durante enero y sobre todo desde febrero, los cobradores presentarán el R1-2, en el cual uno de los representantes del núcleo familiar deberá estampar su firma", dijo al semanario Periódico 26.

El citado modelo, emitido por la entidad, será utilizado a partir de ahora como constancia de pago del servicio.

El cobrador tendrá que firmar en algún vale que el cliente conserve de meses anteriores, como prueba de que pagó. Si el usuario no tiene ninguno, el empleado deberá dejar alguna otra constancia escrita de que se efectuó el pago.

Almira García añadió que la empresa trabaja para tener lo más pronto posible esos recibos.

Además, trabajan para incluir a la provincia en el grupo donde los clientes pueden pagar el servicio a través de la plataforma electrónica Transfermóvil.

Según la directiva, ello sería más cómodo para los consumidores y más económico para la EAA, que todos los meses debe destinar unas 30 cajas de hojas de papel para la impresión de los talones de cobro.

Esa misma razón llevó a ETECSA a suspender la distribución de la versión impresa de su factura telefónica.

Gradualmente el gobierno cubano se va quedando sin papel para imprimir y confeccionar artículos de diversas actividades y sectores.

A mediados de diciembre, el Ministerio de Educación informó que no tiene papel para imprimir y confeccionar las libretas, libros y cuadernos para los alumnos en el curso escolar 2022-2023.

La ministra Ena Elsa Velázquez Cobiella afirmó que el papel del que disponen permitirá la impresión de solo una parte de los materiales, por lo que deben reutilizar los libros y reducir la cantidad per cápita de libretas.

De los libros de texto, se prioriza el texto que destinan a los estudiantes de primer grado, aunque Cobiella adelantó que no alcanzarán para todos los estudiantes.

En Baracoa, debido a la falta de recursos para el sistema educativo, se entregó a los alumnos una libreta para dos asignaturas.

"Se les entregan cinco libretas y un lápiz. Utilizarán una libreta para dos asignaturas. Los lápices están asegurados en la escuela por cuatro meses", dijo el director de una ESBU Licerio Blanco a la televisión estatal.

Una funcionaria reveló que el poligráfico de Guantánamo no está imprimiendo libros de texto porque no hay materia prima, y que las escuelas completan la "base material de estudio" con libros viejos.

"No hemos recibido ningún título de cuadernos de trabajo para secundaria ni para preuniversitario. Solo hay cuatro títulos para enseñanza primaria", precisó la funcionaria.

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