Una cubana denunció el abandono en que permanece el cementerio de Ciego de Ávila con imágenes que muestran cómo la hierba cubre las bóvedas.
“Eso que ven es el cementerio de Ciego de Ávila, que tristemente ya ni se puede ver las bóvedas, es una falta de respeto, dónde están los trabajadores que le pagan para limpiarlo. Fui ayer a llevarle flores a mis familiares por el día de los padres y apenas logré pasar, ya que la hierba está más alta que yo. Ya una vez pagué a un trabajador del mismo cementerio, pero es una falta de respeto”, denunció en Facebook la mujer, que se identifica en las redes como María Herman.
La crisis que afecta todos los aspectos de la vida cotidiana de los cubanos no da tregua siquiera en los cementerios.
Este mismo lunes trascendió una situación similar en el cementerio de la ciudad de Cabaiguán, en la provincia de Sancti Spíritus, que está convertido en una zona de pastoreo de caballos.
“Las imágenes tal vez puedan herir los sentimientos de cualquier familiar que reconozca la sepultura de su ser querido. Es una falta de respeto que el cementerio de Cabaiguán lo estén cogiendo para soltar animales”, denunció la usuaria Sonia García.
En febrero, por su parte, era noticia que los robos y profanaciones de tumbas aumentaron en el cementerio de la ciudad de Las Tunas.
“Y, como si ya la muerte no doliera demasiado, está siendo ultrajado el sitio de reposo de los difuntos y es esta una situación lamentable, conocida a vox populi, y denunciada por la prensa, las autoridades y la sociedad en distintos momentos y diversos espacios”, apuntó el medio local oficial Periódico 26, en un reporte en el que se calificaba de “terrible” ver como habitual los daños a los cementerios y a sus muertos.
En enero, por su parte, una familia cubana que enterró a un ser querido a comienzos de año en el cementerio San Carlos Borromeo, en la ciudad de Matanzas, denunció haber encontrado en la bóveda familiar varios féretros abiertos a los que faltaban restos óseos.
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